⌗☆﹏⊹♬˚𝙎𝙝𝙚 𝙬𝙖𝙨 𝙡𝙤𝙫𝙞𝙣' 𝙢𝙚 (𝙱𝚛𝚘𝚙𝚙𝚢)

⌗⏤͟͟͞͞𝙉𝙚𝙫𝙚𝙧 𝙚𝙣𝙙

Poppy p.o.v:
Pasaron unas horas y todavía me preguntaba a donde había ido Ramón, pensé que a dar un paseo para pensar en sus temas personales pero no le di muchas vueltas al asunto.

Unas horas después llegó a mi capullo, fui a saludarlo y tomó mi mano, se inclinó y la besó, yo solo lo miré impresionada mientras solataba una muy leve risa, se veía con un verdadero príncipe.
- ¿A qué vienes, pastelito? - le dije con mis mejillas ruborizadas.

- A invitarte a dar un paseo, ¿quieres, corazón? -

- ¿Cómo podría negarme? - Lo iba a tomar del brazo pero me lo negó.
- ¿Qué haces? - le pregunté confundida.

- Esto será un poco diferente a nuestros paseos de siempre, ahora te tengo una sorpresa - dijo mientras ataba una tela a mis ojos dejándome incapaz de ver.
- Yo te guiare, no te preocupes, confía en mi -

Fuimos por un camino que se me hizo difícil pero no imposible reconocer, Ramón me sostenía con delicadeza ayudandome a caminar sin caerme ni chocar con algo.

Al deternos me quitó la tela y confirme mis sospechas, estabamos en lugar al que lo llevé cuando vino por primera vez, el cuál me dejó de las mejores y peores experiencias de mi vida.
En medio de el lindo lugar, rodeado de árboles y perfectamente iluminado y cálido por el sol estaba un mantel y una cesta a juego.
- Es muy hermoso Ramón - me voltee y lo miré con una gran sonrisa.

- ¿Si? Pensé que sería un poco simple pero espero te guste, ven, vamos a sentarnos -

Nos sentamos y sacó diferentes bocadillos tdos perfectamente preparados y adornados para que hicieran juego con lo demás que fue dejando en el mantel.
- Gracias por el detalle Ramón, no debías - dije mientras Ramón partía uno de los sándwiches y me daba la mitad.
Estuvimos conversando a gusto por unas horas mientras comíamos todo lo que Ramón había preparado.

En un momento empezó a ponerse ansioso sin razón, me confundí un poco y aún más al verlo levantarse y extender su mano para levantarme también.
- Poppy... - noté que se puso excesivamente nervioso y empezó hasta a temblar y moverse su cuerpo de un lado a otro.

- ¿Pasó algo? - dije acercandome a él.

- No, no, no - dijo alejándose de mí - Es solo que... - dijo mirando para todos lados rápidamente y jugando con sus manos por detrás de su espalda.

No pude hablar antes de que derrepente callera arrodillado en el piso
- Poppy te amo como no tienes idea y me haría demasiada ilusión ser el troll al que veas al despertar y al ir a dormir, el que te acompañe en las buenas y en las malas, el que este ahí incondicional cuando lo necesites y cuando no. Quiero ser todo lo que tu eres para mi, alegría, motivación, seguridad, confianza, apoyo - tomó un poco de aire y llevó sus manos hacia adelante haciéndome ver una caja que tenía en sus manos.

- Poppy Springwater, ¿te casarías conmigo? - lo escuché e inmediatamente lágrimas comenzaron a salir de mis ojos. Se levantó y lo abracé con todas mis fuerzas.

- Claro que si Ramón, si quiero - me abrazó y me empezó a dar vueltas mientras reíamos. Estábamos tan felices que nos caímos al pasto y seguimos riendonos ahí, me sentía tan bien, tan feliz. Hace unos meses no habría ni imaginado como podía mejorar mi vida en tan poco tiempo, estaba tan feliz y amaba tanto a Ramón que sentía que explotaría de emociones.

- Estoy muy feliz de pasar mi vida contigo - dije sonriendo tontamente.
Realmente este momento no podía ser arruinado, era tan mágico, tan nuestro, y solo era uno de los muchos momentos que compartiriamos desde ahora.

(...)

Salto en el tiempo

(3 meses después)
Ramón p.o.v:
Me estaba viendo al espejo acomodandome la corbata y el traje que me habían tomado semanas elegir. Ya estaba todo preparado, la comida, los invitados, la decoración, la música, todo estaba bajo mi supervisión, todo menos Poppy.

Yo no era mucho de tradiciones que no fueran personales pero Poppy quiso que siguiéramos la tradición de no ver a la novia antes de casarse, así que lo acepté y no la había visto en todo el día. Eso me trajo algo de nervios y preocupación pero mis amigos de Kismet (que habían llegado hace unos días a la Villa) y mis nuevos amigos que había hecho desde que llegué trataban de calmarme asegurandome que todo saldría bien, supongo que era cierto pero aún así tenía el miedo de que las cosas salieran mal ¿y si Poppy se arrepentía? Aunque nunca lo dije era algo que aterraba a mi mente y mis pensamientos.
Aún así trataba de convencerme de que todo sería perfecto mientras iba hacia el lugar de nuestra boda.

Llegué y todo se veía aún mejor de como lo había planeado, todo se veía perfectamente convinado, el ambiente era agradable y acogedor, era exactamente lo que queríamos.
Llegó mucha gente que me felicitó, entre esos mis amigos, habitantes de la Villa y el padre de Poppy, el cuál me pidió perdón formalmente, claramente en este punto de mi vida no necesitaba guardar rencores, lo perdone y le asegure que no había rencores.

Ya habían llegado todos menos Poppy y sus mejores amigos, estaba muy nervioso y lo único que hacia era ver hacia todo lados mientras jugaba rápidamente con mis manos y de vez en cuando hablar con mis amigos.

En eso la música empieza a sonar, era una pieza que había elegido especialmente para este momento, estaba muy nervioso y emocionado, pero sobre todo me sentía plenamente feliz. Y ahí estaba ella, con un vestido que combinaba de maravilla con su belleza y brillante personalidad, habían hecho un gran trabajo arreglandola y se veía como la Reina que era, todo mi ser estaba cautivado con ella y mis ojos solo la podían mirar sintiendo que el mundo alrededor dejaba de existir.

Derrepente me encontré frente a frente con ella, tenía una sonrisa deslumbrante totalmente única.
Se dio paso a mis votos, los cuales dije con una voz algo temblorosa y bastante nervioso, pero noté la mirada cariñosa de Poppy que me hacia sentir más tranquilo y seguro.

Al finalizar siguieron los votos de Poppy, y mientras hablaba todo en mi vida comenzaba a cobrar un sentido, todo por lo que había tenido que pasar había válido la pena y todas las heridas habían sido sanadas en ese mismo instante en el que unía mi vida a la suya y empezabamos a construir una vida, ambos, juntos.

Luego de eso se dió paso al beso, el cuál me llevó a ese lugar mágico y único al que solo Poppy podía llevarme. Nos miramos, nuestros ojos estaban iluminados de una manera en la que nunca habían estado. Realmente nos habíamos hecho conocer el verdadero amor el uno al otro, cometimos errores, vivimos nuevas experiencias y conocimos lo malo y lo bueno del otro aceptandolo y queriendonos incondicionalmente.
Luego nos abrazamos fuertemente, tan fuerte como si nunca nos fuéramos a dejar ir, lo cuál era real, nunca nos ibamos a dejar ir, nunca más.

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Queridos lectores, con algo de tristeza y emoción les digo q la historia a llegado a su fin.
Va a haber otro episodio q será un epílogo para finalizar completamente la historia pero este es el fin de la historia en sí.

Quería agradecer a ustedes, todos los q estén leyendo esto, realmente me motivaban a dar lo mejor de mí y espero si se haya notado.

Espero les guste el epílogo (lo tengo planeado para el domingo) y disfruten los nuevos proyectos que tengo pensados, si es q les interesara más d este motivado autor. Sin más, muchas gracias por leer.