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Jungkook

A lo largo de mi carrera he tenido alumnos problemáticos, algunos insoportables tanto que me gustaría golpearlos, eran un constante problema a la hora de querer enseñar, pero un alumno como Jimin era complicado de encontrar, a veces me gusta mirarlo mientras hacía sus tareas, me gusta la tranquilidad en su cara, y es que era precioso.

— Señor Jeon, se lo pido, juro hacer cualquier trabajo que guste, un ensayo de 200 hojas, lo que sea pero no me repruebe.

—Joshua, hemos hablado sobre esto, te di un plazo de tiempo para entregar las tareas faltantes, no lo hiciste, además reprobaste el examen, harás el examen de recuperación.

— Tengo que sacar un 100 perfecto para aprobar, será muy difícil, por favor, señor Jeon.

— Yo puedo ayudarte a estudiar.— Se ofreció Jimin, sus ojos miraban a su compañera, entendía la desesperación de Joshua.— Puedes venir a mi casa para estudiar.

Aunque odiaba esa parte de él, Jimin era así, siempre que miraba a un compañero con problemas iba al rescate. los ojos del chico se abrieron abrazando rápidamente a Jimin. Era molesto, el era solo un dolor de cabeza, ni siquiera se esforzaba por mantener un buen promedio, para que además quiera hacer perder el tiempo de mi mejor alumno.

— Haz un ensayo de 100 hojas sobre el tema, lo quiero listo para el viernes, quiero que tenga todo Joshua, graficas, información coherente y además del ensayo quiero que hagas un entrevista a un adulto sobre cómo le ha afectado, quiero todo para el viernes o tendrás que hacer el examen.

— ¡Gracias señor!, lo tendré todo listo, le juro que será el mejor trabajo que tuvo alguna vez.

Asentí, mire hacia mi salón vacío donde ahora solo estaba el, mirándome fijamente con una expresión extraña en su rostro, pero al verlo solo bajo la cabeza para seguir con su trabajo, era hora del receso pero el siempre estaba aquí, haciendo algo en su cuaderno o comiendo, no tenía muchos amigos, era amigable con todos pero no era muy social, lo mire un poco más, era enfermiza la manera en la que podría mirarlo por horas, siempre llevaba el mismo collar de oro, su camisa siempre estaba en perfecto lugar, abotonada y planchada al igual que su falda, sus labios siempre tenían el mismo tono, un poco rojo pero no demasiado, siempre usaba la misma tinta de labios.

— Señor Jeon...— Cuando menos lo pensé estaba frente mío, sus manos sostenían una carpeta.

— Dime.

— Este es mi ensayo, se que es un poco apresurado entregarlo ahora pero quería saber si tenía algún error, para poder corregirlo.

— Claro, lo revisaré y te diré,¿si?.

El asintió pero no se movió, me miraba con ojos curioso, lo sentía, sentía como me escaneaba, sus labios estaban entreabiertos.

— ¿Cuantos años tiene?.

— 24 años Jimin.

— Oh,¿está casado?.— Rei, me causó gracia, no definitivamente no estaba casado.

— No, ¿por qué lo dices?.

— Su anillo, ahí debe poner el anillo de matrimonio.— Tomó mi mano rápidamente, ni siquiera lo pude procesar, era aterrador lo mucho que me gustó sentir su calor, sus dedos tomaron mi anillo, moviéndolo de lugar, se veía tranquilo.— Es bonito, tengo otra clase, ¿me puede mandar un correo con mis errores?.

Quería tocarlo, mierda, quería poner mis manos en sus mejillas y besarlo, era enfermo, estaba consciente, pero era inevitable, me dio una sonrisa y quise quitársela del rostro, ¿cómo podía estar tan feliz no estando en mis brazos?, ¿cómo se podía mantener tranquilo si no lo estaba tocando?.

No solía salir mucho, a veces lo necesitaba, hoy era uno de esos días, no me importaba que fuera miércoles, solo quería un momento a solas, solo quería pensar, el bar estaba un poco solo, dejaba que el tequila quemara mi garganta mientras los pensamientos me atacaban.

Nadie lo sabía, no iba a dejar que se enteraran de cuanto me gustaba mirar a Jimin, de cuanto me gustaba fantasear con el, paseando por mi apartamento en mi ropa, lo mucho que me gustaba imaginarlo recostado en mi cama, o como me sentía tan patético teniendo erecciones en clase gracias a él y a esa maldita falda que sube mas de lo que debería.

— Jungkook...- Llamaron mi nombre pero no la mire sabía quien era, sentí su peso sobre mi, estaba sentada en mi regazo, sus manos acariciaron mi cara.— Hace tiempo no venias, te extrañé.

— Kass, estuve ocupado, sabes que vengo siempre que puedo.— La tome de la cintura pegándola más a mi.

Mi relación con ella era rara, no podía decir que me gustaba no lo hacía, su personalidad no era mi cosa favorita de ella, no me disgustaba pero jamás podría pasar una vida con ella, pero ella era parecida a él, tenían los mismos labios y su complexión era parecida, si la miraba lo suficientemente lejos podría confundirla con el.

— Estuve esperando por ti desde hace 2 semanas.— Beso mi mejilla.— No creo que seas consciente de lo mucho que te necesito, vamos a arriba.

Lo siguiente qué pasó, era lo mismo que pasaba siempre que la miraba, terminamos follando y justo como en ese momento, me paré de su cama viéndola fijamente, ella me seguía con sus ojos verdes, mientras me ponía el pantalón, se sentó en la cama con las piernas abiertas, dejándome ver su coño, sus labios entreabiertos con una sonrisa, pero no me iba a quedar ahí, jamás lo hacía, no importa lo que hiciera siempre me iría.

— ¿Ya te vas?.— Murmuró , ahora su sonrisa se desvanecía.— ¿Por qué no te quedas esta noche?, ya es muy tarde.

— Por eso me iré, Beck me espera.

— Es solo un perro.— Me molesto, no era un solo perro, era desgraciadamente molesta cuando quería, puede que su físico sea parecido al de Jimin pero su actitud jamás.

— Kassandra es la última vez que te digo que no te vuelvas a meter en mi vida personal, no somos pareja y no eres absolutamente nadie en mi vida.

— ¿Y qué es esto?.

— ¡Por dios!, ¿que eres?, ¿una maldita adolescente?, es sexo, sabías desde un inicio que no te iba a pedir matrimonio, cada vez que nos vemos es lo único que hacemos, no obtendrás mas de mi, confórmate o vete.— Bufé, terminando de vestirme, me seguía con los ojos llorosos, caminé hacia la puerta listo para irme.— ¿Qué será, Kass?, ¿te conformas o no vuelvo?.

— Me conformo...

Teacher Donde viven las historias. Descúbrelo ahora