The sin of the princess

˚Summer˚

En el reino del verano la hija menor, Chiquita, seguía durmiendo plácidamente hasta que empezó a reírse, la razón de su risa era Asa, la consejera, quien le estaba haciendo cosquillas para despertarla

╶A despertarse pequeño demonio que ya es muy tarde -rió antes de separarse de la menor.-

╶Ya voy ya voy unnie -se levantó y fue a asearse y a vestirse, cuando ya estaba vestida fue al comedor viendo sólo a sus hermanos mayores desayunar.- ¿Y papá y mamá? -se sentó al lado de su hermana.-

╶Se fueron a un viaje de negocios y me toca a mí ir a la reunión que tienen -se lamentó el heredero de forma dramática.-

╶¿Comó es que tu prometida te aguanta? -soltó Ruka mirando a su hermano mayor quien se hizó el ofendido.-

Chiquita solo se rió mientras desayunaba viendo como la prometida de su hermano, Leia, llegaba haciendo que el heredero se calmara, los cuatro comieron en silencio hasta que terminaron y las dos menores ayudaron al heredero y a su prometida a arreglarse para su reunión, aunque estaban más para molestar, en un momento Chiquita se quedó con Leia mientras decía que su hermano era malo

╶Ay la niña -la abrazó con un poco de burla por su comportamiento aunque le era adorable.- No sabía que el heredero era taaaaan malo

╶¿Tú también crees que soy malo amor? -se hizó el ofendido cuando Ruka le dió la vuelta para que la mirara a ella.-

╶A ver ni-san -le acomodo un poco la camisa que llevaba.- Okey, listo su futura majestad -rió tomando por los hombros a su pequeña para irse del lugar.-

Ruka llevó a Chiquita a un campo de deportes para que se divirtieron junto  a Asa y Pharita, hicieron como una especie de competición con las cosas que habían saliendo cada ganadora de una modalidad hasta que se abrieron y decidieron jugar baloncesto, pero aún siendo tres contra una, Ruka les ganó sin ningún problema dejando en claro que la hija mediana era una experta en ese deporte, auque para ver una sonrisa en la cara de su pequeña hermanita la mayor las dejó ganar una partida

╶Pharita unnie, ¿me enseñas a jugar fútbol? -miró a la guardia con unos ojos de cachorro a los que la contraria no podía resistirse.-

╶Venga renacuaja -soltó una risa mientras se llevaba a la pequeña a jugar.-

Ruka y Asa se quedaron observandolas jugar con una sonrisa en la cara hasta que el atardecer llegó y tuvieron que volver al castillo, ambas hermanas suspiraron al ver que sus padres no estaban y cada una se fue a su habitación para ir a darse una ducha y estar más cómodas en el castillo