La Verdadera Llama De Tu Corazón ❤️ |EG

Hechizo del amor

- Pero que vamos a hacer si no tenemos nuestros collares? - preguntó Sonata - las Rainbooms los destruyeron hace tiempo recuerden

- Magia de Equestria Sonata - dijo Adagio - solo tenemos que rehacer el hechizo con el que fabricamos los collares

- Perfecto - alagó Aria - pero como? - preguntó de forma monótona - recuerda que nos desterraron a este pinche mundo

- Conozco a la persona indicada - sonrío maliciosamente la peli naranja

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- Muy bien hermana, ya terminamos la lista de pendientes de hoy - sonrió la princesa Celestia

- Los terminamos?! - preguntó muy sorprendida la princesa Luna - ésta es la única vez que terminamos de hacer todo lo que tenemos planeado

- Es cierto - puso su casco en su mentón Celestia - que te parece si nos tomamos un día libre? No hay que dejar a Twilight a cargo, solamente que vigile que todo esté bien, tiene muchos deberes

- Ta weno, pero que no termine como la última vez eh - dijo Luna

- No te preocupes, todo estará bien - la tranquilizó su hermana de cabello multicolor poniendo su casco en el hombro de Luna - es más, que podría pasar? - dijo retirándose del castillo junto a su hermana menor

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Justo en ese instante las Dazzlings atravesaban el portal con Equestria, cayendo todas al piso una sobre la otra

- Auch - se quejó Aria - porqué no puedes dejar de ser tonta ni cinco minutos Sonata?! - le dijo molesta a su amiga de cabello azul

- Perdón Ari - se disculpó la mencionada - pero además estoy de mal humor porque hoy es martes de tacos y no pude comprar antes de llegar aquí - dijo haciendo un exagerado puchero

- Cállense el hocico - les dijo aburridamente molesta Adagio a Sonata y Aria dandole un zape a cada una - tenemos que darnos prisa antes de que nos puedan descubrir y regresarnos al mundo humano

- Bueno, y quién es esa amiga que dices? - preguntó Aria

- Síganme - les dijo Adagio

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Paso un corto lapso de tiempo y las tres chicas llegaron a las profundidades del bosque Everfree, era un lugar demasiado oscuro donde no se apreciaba a observar casi nada y, entre miles de árboles y arbustos había una "pequeña" guarida, por lo que las dazzlings decidieron entrar.

Observaron que aquella guarida no era para nada pequeña, tenía la luz suficiente y en todas las paredes se observaban algunas tenues sombras con forma de semental y en el centro, de una yegua mucho más alta

- Saludos, sirenas - saludó la reina Chrysalis - qué las trae por aquí?

Era una yegua muy alta y esbelta, tenía un pelaje totalmente negro, ojos muy brillantes color verde limón que le daban un toque inocente y una melena de color azul opaco con un cuerno largo y torcido en la parte superior

- Venimos para revisar si puedes restaurar la magia de nuestros antiguos collares mágicos - dijo Adagio sonriendo maliciosamente

- Muy bien - asintió la antigua reina - llevan consigo los fragmentos sobrantes? - les preguntó tratando de inspirarles confianza