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Capítulo 61: Un murmullo inesperadamente poderoso.

Además del ascensor, otras cosas que facilitan el viaje de Xiao Yu están casi instaladas.

Por ejemplo, ese tipo de mini escalera alguna vez solo se instaló en el escritorio de Yan Jin. Ahora, se pueden ver escaleras tan pequeñas en casi todos los rincones de la villa, lo que facilita que Xiao Yu deambule hacia arriba y hacia abajo.

La existencia de estas cosas aumentó repentinamente las actividades de entretenimiento de Xiao Yu. El primero fue el mini edificio en el segundo piso. Xiao Yu se divirtió mucho estos días y encontró innumerables huevos de Pascua y pequeños obsequios.

Algunos son mecanismos del propio edificio, como cuartos oscuros o mapas del tesoro en la pared. La mayoría de los tesoros que se pueden encontrar son bocadillos coloridos y, ocasionalmente, hay algunas campanitas lindas. Otros obviamente fueron arreglados especialmente por Yan Jin, como el pequeño patrón de pez tallado en la esquina o las semillas de melón que cuelgan del árbol con un hilo. Cada vez que Xiao Yu arrancaba una, veía una imagen con un corazón en la otra. Fin del hilo. Cuando Yan Jin regrese por la noche y le dé el papel, obtendrá muchas momas.

Después de eso, Xiao Yu nunca volvería a arrancar semillas de melón del árbol.

Incluso si lo rompiera, escondería el trozo de papel para que Yan Jin no lo viera.

Además de esto, lo más importante es que Xiao Yu finalmente subió al misterioso tercer piso que nunca antes había puesto un pie.

El segundo piso era originalmente una habitación vacía, pero después de que cada habitación se instaló con un mini edificio entregado a Xiao Yu, se convirtió casi por completo en una sala de entretenimiento, lo que hizo que esta seria villa de repente pareciera linda.

Después de enterarse de la situación en el segundo piso, Xiao Yu sintió aún más curiosidad por el tercer piso. Con la ayuda del ascensor, subió en secreto mientras Yan Jin estaba fuera. Sintió... bueno... es un poco. difícil de describir.

De hecho, a diferencia del segundo piso, que es enteramente una habitación de invitados, el tercer piso tiene un vestíbulo y varias habitaciones pequeñas. Las mesas y sillas blancas y el piano blanco en la esquina lo hacen parecer un lugar para tomar el té tranquilamente por la tarde.

Es una lástima que, aunque Yan Jin encontraría a alguien para limpiar la villa cada una o dos semanas, el piso que había estado afuera durante tantos años todavía se veía un poco desgastado y todas las habitaciones estaban cerradas con llave. En el segundo piso, Xiao Yu no tenía forma de entrar.

No sé si fue la ilusión de Xiao Yu, pero siempre sintió que el tercer piso era un poco espeluznante, y si permanecía allí por mucho tiempo, habría una rareza indescriptible.

Si subes las escaleras, no podrás llegar al vestíbulo inmediatamente, pero si tomas el ascensor, verás la pared blanca que da al vestíbulo.

Hay un cuadro al óleo colgado en la pared. La mujer del cuadro es noble y elegante, sentada en una silla europea de madera maciza, como si estuviera en la Europa del siglo XVIII.

Lo extraño es que esta enorme pintura al óleo estaba cubierta de polvo, por lo que Xiao Yu no podía ver claramente la apariencia de la mujer y solo podía sentir vagamente el hermoso rostro y la figura elegante y bien proporcionada.

...

Tal vez porque se estaba divirtiendo mucho estos días, Xiao Yu accidentalmente olvidó lo que estaba murmurando.

Por supuesto, Xiao Yu definitivamente no se ha olvidado de la conferencia de otoño. Ha estado pensando en las exhibiciones durante los últimos dos días. Sin embargo, realmente se olvidó de la copia del diseño que le pidió a Nu Nan que reflexionara la semana pasada.

Días de hámsterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora