Curses - White Shadow

Primer capítulo: Un robo ajetreado.

"He vivido aterrada todos estos años. Escondiendome, tratando de encontrar una salida que no involucrase mi muerte. Habia logrado mantenerme a salvo con Diego tanto tiempo... Nada podia salir mal, a pesar de la cruel realidad que le esperaba a este mundo con los virus. Un destino inevitable ya que nuestra familia estaba muerta."

"Pero el universo funciona de formas que no podemos entender a veces, las cuales al final, sean las que sean, nos guian. A los Akane nos gusta pensar que son nuestros ancestros, hablandonos desde otro plano." 

"El mensaje nunca es claro. No esperaba que viniese en forma de personas ese dia... no estaba segura de si algun dia lo entenderia, o sabria que hacer. Estaba perdida en el dolor  y la culpa sin darme cuenta" 

"Nunca pense encontrar otra luz que me guiase... y tampoco queria seguir a pesar de hacerlo" 

***

Las calles estaban llenas de gente a mas no poder, como era usual en esos días en que se hacian ferias.

Varios vendedores, herreros, alquimistas, montaban sus tiendas en aquel extenso pueblo rodeado por murallas. El sol brillaba proyectando la sombra de las casas por las calles, donde pasaban madres campesinas con sus hijos tomados de la mano, otros jóvenes corriendo con espadas de madera y chalecos de cuero, soñando parecerse a guerreros armados con brillantes espadas y armaduras.

Entre la multitud, dos encapuchados cubiertos por capas oscuras se hacian paso. Uno era mas pequeño que el otro, llevaba unas botas de cuero junto a pantalones azules ya algo viejos, con varios bolsillos y ataduras, la otra encapuchada más alta llevaba lo mismo, pero con pantalones marrones, aparentaba ser mujer por su figura. 

Una bufanda roja colgaba de su cuello, con los bordes algo desgastados, tal como el resto de su ropa parecia que no se habia lavado hace un tiempo.

"Laura, ¿Que hacemos aquí? ¡No tenemos dinero para esto, recuerda!" murmuro el encapuchado más pequeño con una voz algo chillona, entonces de la nada la mujer lo jalo del hombro, llevándolo atrás de unas cajas de madera apiladas en un callejón.

"Y estamos aquí precisamente para resolver eso." Respondió la encapuchada con una voz femenina, asomándose por las cajas. El otro encapuchado desconcertado se asomó también, con varios mechones blancos  de pelo visibles y unos brillantes ojos color ámbar.

"¿A que te refieres?" 

La encapuchada, Laura, no respondio. El chico rodo los ojos soltando un gruñido y se dio media vuelta, gesto al que Laura finalmente le dio atencion.

"Deja de ser tan misteriosa, ¡¿Qué rayos buscas?! y por cierto..." Ahí el sujeto se sacó la capucha, revelando ser un chico joven, de alrededor de 15 o 16 años. Tenía una cabellera blanca larga con varios mechones a los lados, ojos achinados con unos iris amarillentos, y finalmente dos rayas triangulares de color marrón, una en cada mejilla. Pequeñas gotas de sudor bajaban por su rostro.

"¡¿Para que tenemos que llevar esto?! hace DEMASIADO calor" Se quejo entrecerrando los ojos, mirando a Laura con el ceño fruncido. Suspirando, Laura se quitó la capucha por igual, por su aspecto debia tener alrededor de 19 o 20 años. Tenia una larga cabellera roja atada en una trenza que llegaba cerca de su cintura.