Cartas a Madrid. -Alberto Villarreal

Cartas a Madrid

Le escribo esta carta, simplemente porque se encuentra muy lejos y quiero que tenga una parte de mí aunque sea la tinta de mi pluma.

¿Cómo ha estado? ¿España la está tratando bien? Espero que los españoles no se fijen en usted. Esta carta la estoy escribiendo el día que usted se va de la ciudad mientras escucho "The Grave", pero que usted está leyendo esta carta algunos días después. Me conozco lo suficiente para asegurarle que la sigo queriendo, la siga extrañando y la sigo esperando.

Usted me prometió que no saldría con nadie, pero ya sabe que la libero de esa promesa, aunque preferiría que no salga con nadie. Lo que en verdad me importa es que me siga queriendo ¿lo hace? Cuando lo deje de hacerlo dígamelo. Le recuerdo que la puedo esperar todo el tiempo del mundo, siempre y cuando me siga queriendo. No será justo que la espere sino siente nada por mí.

¿Te gusta la ciudad? ¡Puedes vivir sin las alitas! ¿Cuántos días faltan para que regreses? 165, 160. El tiempo para volando cuando escribes a futuro.

Ya se terminó "The Grave" y ahora escucha "White Blank Page" también del mismo grupo ¿la has escuchado? me gusta mucho. Extrañaré escuchar canciones contigo. Extraño abrazarte y extraño besarte. Estoy triste porque ya no recuerdo tu aroma ¡olías riquísimo! De eso estoy seguro ¿Qué perfume usas? ¿El señor huele bien? ¡Já! ¿Qué tal el chile español? ¿Me he convertido en el tipo con el que saliste tres semanas antes de irte a Madrid? Espero que no, pero te repito que si en algún punto me convierto en eso, me lo tienes que decir.

¿Quieres que te siga escribiendo? Me gusta escribir pero no me gusta que sepas cuanto me gustas, aunque pensándolo bien ya es muy tarde para eso de todas formas. Tampoco sientas que tienes el poder, ya sabes que el que manda aquí soy yo. Aunque me traigas mal.

¿Cómo vas con el libro que te regale? Hay una parte del libro que dice así, y cito: "Uno es un grupo de contradicciones intelectuales y emotivas, solamente tú no eres una contradicción. Siempre te quiero aunque te esté odiando por estar lejos." Y pues sí, me cagas por estar lejos.