Algunas aclaraciones antes de comenzar:
"Dialogos normales"
"Dialogos de Kurama"
Pensamientos
Pensamientos de Kurama
Jutsus/Tecnicas
Ahora sí, comencemos:
"Es hora de que terminemos con esto de una vez por todas, ¿No estás de acuerdo Kurama?" Dijo un joven de estatura alta.
Con un puntiagudo cabello de color rubio tan brillante como el sol mismo y unos ojos color azul zafiro que no hacían más que resaltar su ya apuesta apariencia.
Su rasgo mas distintivo eran aquellas exóticas marcas de nacimiento que se asemejaban mucho a bigotes, tres en cada mejilla lo que le daban una apariencia similar a la de un zorro.
Estaba vistiendo una chaqueta naranja y negra con pantalones del mismo color, toda su ropa en estos momentos estaba desgastada y arruinada, producto de las batallas que tuvieron lugar los últimos dos días.
Una profunda y grave voz se escuchó dentro de la cabeza del joven.
"No podría estar más de acuerdo muchacho" dijo la voz, "Considerando lo que ella hizo a tus amigos y a tu padre"
"Lo sé", respondió el joven con angustia reflejada en su cara, "Es por eso que...¡esto termina aquí!"
"Ya he asimilado las memorias de tu padre y las mezclé con las tuyas" Respondió Kurama, el mayor y más temerario de las nueve bestias con colas, el llamado Kyubi no Kitsune (Zorro de las Nueve Colas).
"Haz buen uso de ellas, no dejes que su sacrificio sea en vano" Dijo Kurama al momento que sentía que las memorias de Minato abandonaban su mente para irse a la de Naruto.
"Eso ni se cuestiona" respondió el rubio, "Naruto Uzumaki jamás retrocede a su palabra." Exclamó a la vez que sentía las memorias de su padre llegar.
"Esa es la actitud" dijo el zorro, "Ahora vamos a acabar con esa maldita mujer de una vez por todas"
"¡Es lo tengo planeado!"
La mujer en cuestión estaba suspendida en el aire con una mirada fría y sin emoción haciendo uso de su mejorada vista para observar todo a su alrededor con un ojo extra en la frente.
La Diosa la Destrucción, Kaguya Otsutsuki, realmente daba honor a su autoproclamado apodo, solo bastaba con mirar el terreno alrededor de ella, todo era un cementerio apocalíptico de proporciones bíblicas. Incontables cadáveres de shinobis junto con una fauna completamente destruida plasmaban toda la escena, múltiples cráteres decoraban la zona a kilómetros a la redonda y el cielo estaba completamente gris, como si los dioses estuvieran llorando por tanta muerte y destrucción.
Después de que ese maldito traidor a la hoja, Madara Uchiha, sellara al Diez Colas dentro de si mismo, inadvertidamente liberó a la Diosa, desde ese entonces ha estado causando destrucción enloquecidamente.
Por innumerables horas, los shinobis de la Gran Alianza que no estaban bajo el control del Tsukuyomi Infinito intentaron hacerle frente a la Diosa, pero pronto se dieron cuenta que no importa que estrategia, plan, ninjutsu, trampa, genjutsu o mucho menos taijutsu de cualquier tipo podían sin siquiera hacerle un rasguño o mucho menos matarla. Kakashi Katake ya había gastado todas sus reservas de chraka y estaba recuperándose con la ayuda de Sakura Haruno. Obito Uchiha, el enemigo convertido en aliado yacía inconsciente en el suelo debido a la fatiga con un severo caso de chakra extenuado. Los Hokages revividos por el Edo Tensei, del Primero al Cuarto se sentían mas impotentes que nunca, y aun más cuando el alma del Segundo fue forzosamente extraída de su revivido cuerpo tornándolo en cenizas y dejando un clon del Zetsu Blanco en su lugar.
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Bell Cranel - Jinchuriki Del Nueve Colas
AdventureNaruto Uzumaki se encontraba en una dura batalla contra la autoproclama Diosa de la Destrucción Kaguya Ōtsutsuki. Era una batalla perdida, Naruto y los sobrevientes de la alianza habían intentado todo los que les fuera posible pero nada era capaz d...