prologo

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Caminando, viendo el pasar de las horas la gente viviendo su vida como maquinas estaticas haciendo caso a cierta programacion, evitando los problemas de agentes externos ahi estaba ella sentada en  una banca con  su mirada perdida en el celular esperando a recibir buenas noticias.
Hacia tiempo ya de haber treminado la secundaria con honores, ella esperaba anciosa recibir un mensaje de aseptacion de las tantas univercidades a las cuales mando solicitudes de admicion; ya que apesar de tener las mejores notas de su promoción, no la tomaban en cuenta por el simple echo de pertenecer al peor estrato de la sociedad.

Ya habian pasado 5 años desde el incidente que marco a toda su familia, su padre después de ser estafado por sus tíos se vio obligado a asumir toda la culpa de la malversacion de fondos y deudas externas que habían sido sacadas a su nombre, esto iso que su familia decaída al último estrato. Lo que causo que sus vidas se vieran envueltas de caricias y el hecho de ver que sus hermanos y padres tengan que trabajar en un horario inhumano para pagar las deudas y poder subsistir.
Ella ya estaba cansada de ver sufrir a su familia y la aceptación a la universidad le abriría las puertas para un buen puesto de trabajo y para ayudar a sus padres. Pero lamentablemente ni una sola universidad se había contactado con ella; con la cara llena de preocupaciones decidió volver a su casa, pero sentía un gran peso en su cuerpo.
Pasado unos minutos de haber caminado por unas cuadras llego a la puerta de su casa sintiendo un peso sobre sus hombros que le impedían abrir esa puerta destartalada, hasta que sintió que alguien le tocaba el hombro; ella  dio un pequeño brinco u giro su mirada la persona detrás de ella estaba vestida con un terno completamente negro y unos lentes oscuros.

-disculpe esta buscando a alguien- pregunto tímidamente

- usted es la señorita alice- pregunto con su voz grave

En su mente se preguntaba porque la estaba buscando.

-si, soy yo que es lo que desea- pregunto alice

- señorita alice usted conose sobre el juego Another Chance.

Alice con la mirada fija en el hombre que estaba frente a ella asintió con la cabeza.

- bueno usted a sido seleccionada para esta nueva etapa espero contemos con su participación - expreso

Alice todavía incrédula no pudo responder, en ese momento el señor le alcanzo una tarjeta

-esperamos su llamada- Alice con las manos temblorosas sujeto la tarjeta y en ese momento el señor se dio la vuelta sin esperar una respuesta, se retiro.





Y así comienza mi historia.

EL COMIENZO POR EL CAMINO DE ORODonde viven las historias. Descúbrelo ahora