~ Cuatro

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-_______

Ya habían pasado semanas desde que Álvaro apareció en la tienda, quizá se había asustado por insinuarle que me invitará a salir, después de todo, a los chicos no les gusta la presión...

Suspire cansada resignandome a que quizá no lo volvería a ver, ¿Por qué carajos no le pedí su número?

Me estaba reprochando a mí misma, hasta que el ruido en la campanilla de la puerta me hizo girar a ver quien abría...

-¡_____! ¡______!- gritó aquella chica, quien al acercarme la pude reconocer, era Antonella, una de mis vecinas pero con la cual me llevaba muy bien, conviviamos a menudo

-Ah, sos vos- dije con un poco de desilusión, creí que podría manifestar a Alvin con mis pensamientos

Me colgué en el hombros la franela con la que limpiaba los vinilos y me dirigí al mostrador

-¿No te da alegría verme?- cuestionó Anto

-No es eso, simplemente creí que eras alguien más...- inconscientemente mis ojos se centraron en una esquina de la tienda, donde se encontraba un florero con unas rosas marchitas, me negaba a tirar el regalo de Alvin...

-Auch, eso dolió- fingió ofenderse llevando su mano al pecho, pero luego siguió mi mirada hasta aquella esquina -Ouh, _____ ¿te las dió algún enamorado?-

Negué con la cabeza y ahora yo hable, -Eso no es importante, contame porque estas tan emocionada-

-¿Lo olvidaste?- arqueo una de sus cejas

-No, claro que no... ¿como podría olvidar eso?... Pero, sólo para refrescarme la memoria ¿Qué se supone que olvidé?- no recordaba nada

-¡Lo sabía! Lo olvidaste, ¡Mi graduación!-

Cerré los ojos y me maldije una vez más, ¿como había podido olvidar algo tan importante?

-Lo siento Anto... Eh estado pensando muchas cosas últimamente, la tienda, mis estu...-

Sin poder terminar la chica me tomó de la mano

-No pasa nada ____, pero para perdonarte si o si me tendrás que acompañar a comprar el vestido-

-¡¿Qué?! ¿Yo?, Antonella, sabes que no tengo tiempo-

-Nunca tienes tiempo, todo el día estas en la tienda ¿cuando será el día que te des un momento para ti?-

Quizá tenía razón, mi rutina diaria era de mi casa a la universidad, de la universidad a la tienda y de la tienda a mi casa, se repetía el siclo una y otra y otra vez

-Bueno, podríamos ir a la hora de la comida, casi nunca hay gente a esa hora...- accedí a acompañarla al día continuo

[...]

A la mañana siguiente, aún ni siquiera salía el sol y Antonella ya estaba llamando a la puerta de mi cuarto, mi madre la había dejado pasar

Le abrí la puerta un tanto molesta por el sueño que aún tenía

-¿Enserió Antonella? No me jodas que pretendes ir a esta hora al centro comercial- me frote los ojos y miré el reloj

6:50 a.m.

No habría nada abierto a esa hora

A las 10:05 a.m. emprendimos el viaje...

Estuvimos de tienda en tienda buscando un vestido bonito, hasta que llegamos a la tienda indicada

-¿Y? ¿Ya viste algo de tu agrado?- me pregunto Anto

-¿Yo? Lo importante es que vos decidas- torcí los ojos pues ella ya lleva casi dos probándose ropa sin que ninguno le convenciera

-¡Vos también busca algo! Iras conmigo a mi graduación, tontita-

Me negué, eso no era parte del trato

-Vamos _____, te la pasaras bien, ya hable con tu padre y él se hará cargo de la tienda ese día, aparte, tocará una banda que al parecer es muy buena, no te estaría invitando sino supiera que te vas a divertir-

Esa chica tenía cierto encanto que convencía a cualquiera, aparte escuchar una banda en vivo era lo que más me gustaba en la vida, no importaba si la banda era gratamente buena o horriblemente mala, me gustaba la música

A comparación de mi compañera, yo escogí mi vestido en un instante;

Un vestido color negro con pequeños toques verdes, que se ajustaria perfecto a la noche

Teniendo el vestido ya pagado, salí de la tienda, dejando a mi amiga con unas expertas en la moda (las encargadas de la tienda)

Dentro de la plaza había una tienda de helados, compré un cono de vainilla y comencé a apreciar los pequeños detalles del lugar

-Alvin
Llamaron a la puerta: 7:34 a.m.

Eran unos golpes tan insistentes que pareciera que estuvieran matando a alguien afuera

-¡Ya van!- grite molesto ¿Quien carajos venía a molestar a esta hora?

En cuanto abrí la puerta ahí estaban esos 3 raros

-¡Vaya! Hasta que abres- dijo Tavella

-Buena pijama- dijo burlesco(? Roberto pues aunque me cuesta admitirlo; aun duermo con una pijama de dinosaurios

Y Riki... Bueno, Riki sólo se pasó al lugar yendo directo al refrigerador por un jugo

-¿Qué demonios hacen aquí?-

-¿Qué más? Nos llamaron para tocar el próximo finde pero de igual manera deberíamos ir a comprar ropa inmediatamente- explicó Riki

-¿En verdad los consideran para eventos de esa magnitud?- cuestione

-Tal parece- me respondió Robert

Fue así como después de cambiarme nos fuimos a una de las plazas más cercanas donde vendían y alquilaban todo tipo de trajes

11:34 p.m. y aún no encontrábamos nada que se ajustará a nuestro presupuesto

-¡No me jodas! 4000 por la renta de un traje ¿Él va a tocar el bajo por mí o que?- exclamó Tavella y tenía razón, los precios eran excesivos

Vagaron un rato hasta que llegaron a una tienda con precios excelentes

Todos ya tenían sus trajes, menos Alvin, quien se esforzaba por encontrar un traje que convinara con una corbata Verde

-¿No era más fácil escoger una corbata que combinará con el traje, a un traje que combinará con una maldita corbata?- dijo Tavella

Pero en la cabeza de Alvin aún resonaban las palabras de _________

"EL VERDE ES TU COLOR"

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⏰ Última actualización: Jun 09 ⏰

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