Capítulo 1

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—¡Esa es mi niña!— Gritó Odalia al ver a su hija Amity en su primer concierto, Amity portaba una alegre sonrisa y la emoción recorría cada parte de su cuerpo, la gente gritando por Amity y las demás integrantes de su grupo.

Odalia y Alador al lado de Emira y Edric observaban todo con conmoción, su hija se había esforzado tanto para estar donde esta ahora, les alegraba tanto verla en el escenario con una gran sonrisa, ojos brillando y risas de emoción que no podía contener.

Tantas veces que Amity no había podido pasar tiempo con ellos o si quiera con sus hermanos por practicar ya sea idiomas, baile, canto, grabar sus líneas, el video musical, etc, tanto tiempo que no podía al menos cenar con su familia al llegar a su casa por el cansancio, tanto esfuerzo al fin dio frutos.

Los Blight habían dejado un día libre para poder asistir al concierto de Amity, ya que sus vidas son demasiado ocupadas.
Odalia y Alador con sus trabajos, reuniones, llamadas con gente importante, etc.
Edric y Emira saliendo a dormir con sus amigos, al cine, a fiestas y con su escuela.

Pero aparte de la familia Blight, se encontraba una chica de ojos color café observando a la menor al igual que su familia.
Luz Noceda observaba a Amity con una leve sonrisa y ojos brillando.
Para Luz, Amity se veía preciosa en el vestuario que le habían escogido y el maquillaje que le habían puesto, resaltaba cada facción de su rostro.

Luz también había dejado un día libre para poder asistir al concierto del grupo de Amity ya que tenía un trabajo en una cafetería en el cual tomaba dos turnos, día y noche ya que la persona que le paga es un tacaño que no le cae del todo bien Luz.

Las luces sobre la Blight hacían que se viera más radiante, la manera que caminaba sobre el escenario era perfecta, parecía un angel.
Cada cosa que Amity hiciera era asombroso, tanto como a los ojos de la Noceda como a los de la demás gente en el concierto.

Solo que Luz detestaba escuchar tanto griterío tan cerca de ella, literalmente al lado de su oído, era irritante, pero después de todo esas cosas eran normales en los conciertos, pero Luz solo iba a ver a una persona en especial; A Amity, quería escucharla cantar a ella, no a unos desconocidos que parecían desesperados por hacerse notar por los cantantes.

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—¡Todo se sentía tan irreal! ¡La gente gritaba y aplaudía y cada que miraba a alguien gritaban mi nombre!— Gritó emocionada Amity mientras recordaba de nuevo todo su concierto, recordaba claramente cada una de las personas a las cuales miro y estas estas se congelaban o a los que gritaban que la amaban y cosas así, o los que le tiraban regalos o tenían carteles con su rostro en el, Amity los miraba con conmoción y hacia un corazón con sus manos, la hacían sentir demasiado especial. Sin duda fue una de las mejores noches que había pasado en toda su vida.—¿Tu fuiste a verme?—

—Si, y en primera fila.— Luz revolvió el cabello de la menor con ternura.— La gente de allí casi me rompen los tímpanos.— Amity soltó una pequeña carcajada.

—Pobre perrito maltratado.—

—Come tu chicle de menta y callate.— Amity hizo caso y abrió su pequeño paquete de chicles, tomó uno y se lo metió a la boca haciendo una leve mueca al sentirlo un poco ácido— Invita.— Luz agarró uno y también se lo metió a la boca, haciendo el mismo gesto que la menor.

—¿Hoy te vas a ver con mis hermanos?—

—No voy a poder, el amargado de mi jefe quiere que trabaje hoy y mañana hasta las tres de la tarde por no haber ido ayer.—

—Renuncia, yo te dare dinero y vivirás conmigo y mi familia.—

—No soy una mantenida.— Luz apretó la nariz de Amity y después la abrazó y la atrajo a ella.

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⏰ Última actualización: Jun 16 ⏰

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