𝑬𝒍 𝒆𝒏𝒄𝒖𝒆𝒏𝒕𝒓𝒐 𝒆𝒏𝒕𝒓𝒆 𝑫𝒐𝒔 𝐌𝐮𝐧𝐝𝐨𝐬‹𝟹𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐 𝑴𝒂𝒍𝒇𝒐𝒚

𝑿𝑿𝑽𝑰𝑰𝑰 (28)

Maratón 1/2

𔗌 𔖴 𔖳

Abril 27 1995

Sábado

𔗌 𔖴 𔖳

Estos tres días Naomi y yo no nos hemos separado.

Cuando lo estamos es como si un vacío se apoderara de mi corazón y la extrañara con todas mis fuerzas como cuando se fue hace unos quince minutos.

Eso es lo que siento ahora cuando fue a provar su vuelo junto a su madre hace media hora.

—¿Falta mucho para que vuelvan?—pregunte por décima vez y el padre de Naomi me ve con ganas de matarme.

—Como te respondí hace dos minutos, ¡Volverán cuando terminen!—sus ojos lobonus me miran con desagrado.

Los demás se rien de mi situación.

Aunque sus carcajadas estallan al escuchar mi queja.

—Extraño a Naomi, la quiero en mis brazos—suplique como un niño mimado y como si la hubiera invocado, ella y su madre cruzan la puerta para entrar en la pequeña cabaña—¡Mí rosa!

Me le encime y busque refugio en su cuello y ella corresponde mi abrazo de inmediato.

—Te extrañe tanto—susurra en mi oído y poso mis labios sobre los de ella para hacerle entender que también la extrañe con mi vida.

—Cariño, calma tus celos lobonus—nos dimos la vuelta y el padre de Naomi estaba a un segundo de transformarse en lobo—. ¿Te tengo que recordar como eramos tu y yo cuando te marque con mi magía?—indagó mientras acaricia el cabello del señor, su enojo se calmó y se escuchó un ligero ronrroneo de su parte.

Naomi acarició mi hombro y me dió a entender que quería que fuéramos a su habitación.

Pensamos que nos colamos “discretamente” a ella pero su madre espeta con algo de gracia: —Sí van a hacer travesuras no sean tan ruidosos, sean civilizados—Naomi se sonroja por su comentario.

—No haremos eso madre—responde con nerviosismo y yo la miro de forma tierna.

—Y tu padre no es un lobo toxico.

—¿Yo qué?—responde embobado por las caricias de Lucy.

—No es nada cariño—besa su mejilla y otro ronrroneo sale del interior de su garganta junto a una sonrisa de idiota. Veo que es verdad que los hombres lobos aman con el alma a sus parejas—. Diviértanse—su doble sentido le saca un suspiro a Naomi y toma mi mano para llevarnos a su habitación.

Al entrar ella se recuesta en la cama y yo le hago compañía en ella, me aproximó a su rostro con deseo pero ella interpone su mano colocandola en mi frente alejandome de su rostro.

Mi ceño se frunce como respuesta y la confusión me invade por su actitud.

—¿Qué sucede?—pensaba que no era tan serio hasta que se endereza y su mirada refleja algo de preocupación.

—Anoche, yo. . . Mmm, tuve un sueño—baja su rostro y toma mis manos, siento como las de ellas tiemblan un poco—. Quiero que no te asustes o por lo menos no te descontroles tanto.

—¿Qué soñaste?—hable con algo de miedo.

—En mi sueño, estábamos en el jardín de Hogwarts que tiene conexión con el bosque, estábamos librando una batalla con alguien—sus ojos se cristalizan al recordarlo y una lágrima baja por su mejilla, la seco con mi dedo gordo mientras ella sigue su relato—, la cuestión es que tú y yo nos peleamos con alguien, no ví su rostro, y. . .

Su rostro se puso rojo al romper en llanto sobre mi hombro, acarició su cabeza en forma de consuelo, su llanto son como cuchillos en mi corazón y alma.

—¿Qué sucedió?—levanto su rostro y me miró, en su mirada solo había temor y tristeza.

—Lo siguiente que ví fue que tú me sostenías en tus brazos mientras sangraba—mi vista se nubla y ahora los dos parecemos cascadas sín fin.

—¿Qué? ¿Cuando? ¿Cómo?—pregunté como si eso aliviara mi angustia.

—No lo sé, pero, Draco. Yo soñé cuando me descubrieron aquel día, yo me ví debajo del sauce llorando.

—O sea, es posible que tú sueño. . .

—Tal vez sí, tal vez no. Pero, joder, se sintió tan real que sentí como la vida me abandonaba.

La atraje a mis abrazos como si eso borrara lo que vió, lo que podría pasar en unos meses o quizás días.

Jamás imaginé que nuestro tiempo juntos ahora tenía fecha límite.

—Tengo miedo, mí huroncito—sus ojos reflejaban aquella emoción que la carcomía por dentro—. Tenemos tantas cosas por vivir, tengo tantas cosas por vivir y experimentar, no quiero dejar a mis padres ni a tí, ni siquiera he podido cumplir mi sueño de ser madre porque mi cuerpo no es capaz de crear vida hasta que tenga venite, yo. . .

—Naomi—la interrumpo tomando sus hombros—. Aun no sabemos con certeza si es verdad o no, mientras, trata de pensar positivo, hablaremos con tus padres para saber cuál es la probabilidad de que. . .

—No quiero que mis padres se enteren—me miro a los ojos—, no quiero preocuparlos, sobretodo a mí padre, soy su princesa, su niña. No quiero torturarlos de esta forma con la incertidumbre de saber sí es falso o verdadero. Es mejor que quede entre nosotros.

—Esta bien.

Unimos nuestros labios y ella se sentó en mi regazo y tomo mi cuello para no alejarme de su lado.

—Hazme olvidarlo, ¿Sí?

-Tus palabras son órdenes, mí rosa.

Tome su cintura y la recosté en la cama.

Mis besos húmedos envolvieron su cuello y sus jadeos de excitación me hicieron olvidar poco a poco nuestra conversación.

𔗌 𔖴 𔖳