Tn es una chica llena de inseguridades, que se percibe así misma como tonta a pesar de sus logros y que tiene problemas para darse a respestar.
Lizzy y Petunia, son sus amigas de toda la vida que sin importar lo que suceda, la aman.
'Me miran como si hubieran visto un fantasma...'- Lizzy y Petunia llevaban ya un buen rato mirando a Tn de pies a cabeza.
"¿M-me veo mal?" - Ante la mirada de las dos Tn se sentía pequeña y sentía que en cualquier momento iba a llorar. 'Sabía que no era buena idea venir...'
Los ojos de Petunia y Lizzy se abrieron como platos. Nunca esperaron que Tn se viera tan... bonita
"¿Que?, ¡Claro que no!" - Dijo Petunia, y se acercó antes de tomar las manos de Tn entre las suyas.
Los ojos de Tn se abrieron con sorpresa, de las tres chicas, ella era la más insegura. Y las tres lo sabían perfectamente. Petunia y Lizzy conocían las inseguridades de Tn. Ellas la conocen más que nadie, así que sabían qué hacer.
Petunia agarró uno de los espejos de la pared y apuntó a Tn. - "¿Que ves?"
Lizzy se acercó y puso una mano en el hombro de Tn, dándole un apretón tranquilizador.
"Eh... ¿una chica...?" - Pregunto, realmente no esperaba una pregunta así.
Petunia levantó una ceja y suspiró ligeramente molesta
"¡Obviamente! ¿Pero qué más?"
"A Lizzy, con una mano en mi hombro..."
Dice, tomando la pregunta literalmente, que sabía que Petunia se refería a otra cosa, pero la idea de llamarse 'bonita' era vergonzosa, al menos para ella. No quería verse como alguien egocéntrica o narcisista.
Petunia se palmeó la cara mientras Lizzy soltaba una pequeña risita. Amaban a Tn, pero a veces la niña podía ser un caso perdido.
"Tn, cariño." - Dijo Petunia mientras movía el espejo hacia el campo de visión directo de Tn
"Quiero que te mires y me digas lo primero que te viene a la mente cuando te ves en ese espejo"
Tn solo se miró al espejo sin darse cuenta de que se le humedecian los ojos.
No había visto ni un cambio en su apariencia desde que se fue a otro país. Pero ciertamente había cambiado mucho.
La piel de Tn era suave. bien cuidada, al igual que su cabello. Pero sus inseguridades sólo veían lo malo, pero ¿había siquiera algo malo? Bueno no, ella simplemente los inventaba.
Si había algo en lo que era buena era en el auto sabotaje, aunque no era sólo culpa suya, pero también la de sus padres, concretamente su madre, quien era una completa narcisista, quien se ha encargado de masacrar la autoestima de Tn cada vez que tenía oportunidad.
Petunia y Lizzy observaron mientras Tn se miraba fijamente en el espejo. Conocían los pensamientos que pasaban por su cabeza en ese momento. Lo habían visto todo antes. Pero no importaba cuántas veces le aseguraron a Tn que era hermosa, su mente no lo creía. En cambio, creía lo que su madre le había inculcado desde que era niña. Y lo odiaban. Odiaban el poder que tenía la madre de Tn sobre la niña.
Petunia colocó una mano en la mejilla de Tn, su pulgar limpiando suavemente el comienzo de una lágrima.
Tn se quedó estupefacta, sin darse cuenta de que había comenzado a derramar unas cuantas lágrimas.
Los ojos de Lizzy se abrieron cuando vio las lágrimas cayendo por las mejillas de Tn. Ambas abrazaron a Tn en un abrazo reconfortante*
"Shhh... Está bien querida..."
Petunia habló en un tono suave. Acariciando suavemente el cabello de Tn.
Ambas chicas conocían bien esta reacción. Desafortunadamente lo habían experimentado muchas veces antes.
Unos minutos después, estaban todas sentadas en una banca del centro comercial, Lizzy había pasado por el proceso de pagar lo que habían comprado mientras Petunia y Tn habían ido a comprar algo dulce para relajar a esta última, por lo que Petunia y Tn estaban comiendo helado cada uno mientras Lizzy solo los miraba comer, ella misma había dicho que no quería uno.
Petunia comía su helado lentamente, robando miradas a Tn. Pudo ver que la niña todavía estaba inquieta y preocupada, a pesar del dulce.
Petunia colocó una mano suave sobre la rodilla de Tn, dándole un suave apretón.
"¿Te sientes mejor, querida?"
Lizzy los vigiló atentamente, observando en silencio su interacción. Podía sentir que todavía había algo en la mente de Tn.
"Si, muchas gracias, chicas. Me alivia saber que puedo volver a contar con ustedes." - Dice, recordando cómo se sintió sola durante tanto tiempo en el extranjero sin sus amigas.
Petunia dejó escapar una risa suave y alegre - "Nunca más tendrás que preocuparte por eso. Siempre puedes contar con nosotras, cariño"
Lizzy asintió con la cabeza, una cálida sonrisa adornando sus rasgos.
"Pase lo que pase, siempre estaremos aquí para ti. Estaráscon nosotras para siempre, nada nos volverá a separar."
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