PANIC ROOM (tsukishima kei)

CAP4-AOBA JOSHAI

AVISO: bueno, decidí que la historia dejara de estar narrada en primera persona y de ahora en adelante será narrada por el narrador omnisciente

También decidí, que cuando un personaje haga un comentario sarcástico las letras serán diferentes, ejemplo: "si no me dices no me doy cuenta"  y también cuando un personaje diga algo como riéndose o lo diga de broma usaré esto, ejemplo "te voy a golpear"

También pedirles perdón por no haber actualizado, en bastante tiempo, tuve unos problemas con mi Internet y, más aparte eh estado más ocupada ahora que estoy entrenando

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UNA PELIRROJA SE ENOCONTRABA CAMINO A SU ESCUELA, hoy era un día ligeramente soleado, el clima estaba perfecto a su parecer, la pelirroja se encontraba caminando por una calle ya cerca de su escuela, esta iba casi perdida en sus pensamientos mientras escuchaba música, para ser más exactas su canción favorita y que según ella representaba una gran parte de su vida (DOLLHAUSE de melanie martinez) hoy se encontraba caminando sola mientras iba a su escuela, ¿la razon? su hermano había tenido entrenamiento matutino, más aparte de que estaba enojada con el

La pelirroja llegó 15 minutos antes de que iniciarán las clase, por lo cual tuve un rato libre que decidió usar en escuchar música, curiosamente es lo que la chica siempre hacía, ya sea que estuviese con gente o estuviese sola. Al rededor de 5 minutos se abrió la puerta del salón dejando ver a 2 cabezas muy conocidas, una cabellera verdosa y una muy rubia, rápidamente supo de quien se trataba, tsukishima y yamaguchi

- buenos días

- buenos días

- buenos días yams, buenos días tsuki

-no me digas tsuki

- como digas, tsuki -- dijo ella enfatizando el apodo --

-tsk

la pelirroja y el pecoso se voltearon a ver entre risas y con una gran sonrisa burlona, en ese momento dieron el timbre dando así el inicio a las clase del día

3 periodos de clase dieron fin, y así dando inicio al receso para los profesores y alumnos, y valla sorpresa que se llevó la pelirroja la notar a un pelinegro en la entrada de su salón de clase, era tobio, su hermano. No había hablado con él desde su pelea y, se sentía mal por ello, pues sabía que su reacción había sido demasiado exagerada, no debió actuar así, y mucho menos reaccionar así, su hermano simplemente estaba haciendo lo que le hacía feliz, su deporte

A paso lento se dirigió a la puerta de su salón de clases, dispuesta a hablar con su hermano y pedirle perdón, decirle que había estado mal su reacción y que no quería que estuvieran mal, al llegar a la puerta pudo ver que su hermano se encontraba notablemente nervioso, al menos para ella, por que si fuera una persona que no lo conociera diría que estaba normal, no nervioso, no nada, simplemente normal, pero para alguien que había convivido tantos años con el era fácil suponer cuando estaba bien o cuando estaba mal o nervioso, tobio era literalmente un libro abierto para ume

--- ¿podemos hablar?

--- si, pero no aquí, vallamos a la azotea ven

y haci los 2 emprendieron camino a la azotea de su escuela, si bien era algo grande pero era fácil llegar a allá, los hermanos iban en total silencio, uno bastante incómodo, pues no se habían hablado desde su pelea, el querer hacerlo ahora y en la escuela era raro, muy raro, pero en realidad sabía cuanto había batallado su hermano en decidir si ir a hablarle o no, sabía que era un egocéntrico de primera y que casi nunca buscaría el solucionar las cosas, al llegar a la azotea, los dos hermanos entraron sin ejercer ninguna palabra, los dos eran demasiado orgullosos para hablar y pedirse perdón, si bien el de mayor estatura había dado el primer paso y había sido el, el que fue con ella para poder hablar, ninguno de los dos decía algo y seriamente se empezaba a poner muy incomoda y tensa las situación