Era el día en el que Taehyung le pediría a Jungkook ser su novio después de varias citas, algunas organizadas por sus amigos las cuales salieron muy mal, de solo recordar que había caído a la fuente de un parque por seguir la estúpida idea de Namjoon de cantarle parado en la orilla le daban ganas de lavarse la memoria con cloro para no recordarlo más.
—¿En serio no quieres que contratemos un mariachi? —preguntó Jin.
—¡Ya dije que no! Conociéndolos, de seguro ustedes serán el mariachi, lo van a arruinar todo.—dijo frustrado. Sabía cómo eran sus amigos.
—Yo le pedí a Jimin que fuera mi novio con un mariachi. —habló Yoongi abrazando a su novio.
—¿Funcionó? —preguntó Namjoon.
—No, por eso se lo volví a pedir sin el mariachi.
—Ya casi es hora de que terminen sus clases, me voy. —cambió totalmente de tema al ver la hora en su reloj.
Se levantó de la banca de las mesas donde estaba sentado y fue corriendo hacia su destino cuidando que su peinado siguiera en su lugar. Se había preparado especialmente para la ocasión.
—¡Suerte! —le animó Jimin.
—¿En serio no te gustó el mariachi amor?— le preguntó Yoongi con un puchero.
—¿Realmente preguntas eso después de que el mariachi me cambió el nombre?
—¡No es mi culpa que te haya llamado Jinnie! Le dije claramente que te llamabas Park Jimin.
—¡Era el nombre de tu ex!
—¡No es la única Jinnie!
—Que le dijo que te llamabas Jinnie dice.— se unió Namjoon a la discusión provocando más el enojo del pequeño.
—Que extraña a su ex dice.— también se unió Jin.
—¡Cállense! —les gritó provocando sus risas—. Mi amor, no es verdad yo solo te amo a ti, te lo juro. Eres el amor de mi vida.—besó suavemente sus labios.
Seokjin y Namjoon pusieron una mueca de asco cuando vieron a Jimin devolverle el beso y como sintieron que se habían convertido en aire en el momento en que Yoongi lo tomó de la nuca para profundizar el beso decidieron irse a ver algo mejor que sus amigos comiéndose la boca.
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Llegó hasta la facultad de Jungkook, esperó unos cuantos minutos para que saliera junto con sus compañeros. Se acercó a él dándole un lindo abrazo en forma de saludo.
—¿Cómo fueron tus clases bonito? — preguntó sonriéndole dulcemente.
—Bien, ¿Y tú?, ¿Por qué estás tan peinado? —Preguntó viendo su peinado hacia atrás dándole un aspecto elegante.
—Bueno, hoy es un día especial.— Ambos quedaron mirándose por varios minutos en su propio mundo. En ese momento sacó una pequeña caja de su bolsillo y la abrió dejando ver dos anillos plateados —. Jungkook, sabes... a mí me encantaría poder llamarte... mi novio.
—Yo...— dijo viendo los anillos y después a Taehyung.
—Sé que quizás esto es muy sencillo y poco memorable, pero ¿Lo serías?, ¿Serías mi novio?
Taehyung sacó uno de los anillos y lo puso en el índice de Jungkook. Lo vio con más detenimiento y se dio cuenta que el anillo tenía grabado con letras cursivas el nombre Kim Taehyung. Después vio el de su ahora novio y ese tenía el nombre Jeon Jungkook.
Era la señal de que ambos se pertenecían. Desde esa noche que se conocieron, Taehyung era de Jungkook y Jungkook de Taehyung.
—¡Le dijo que sí! — escuchó el grito de felicidad de su amigo Namjoon detrás de él.
—¡VIVAN LOS NOVIOS! —gritó Jin.
—¡¿En serio no quieres el mariachi?!, ¡Es que ya viene para acá y le dije que tú le pagarías! —le gritó Namjoon recibiendo una mirada amenazadora de Taehyung.
—¿Mariachi? — preguntó Jungkook divertido.
—No les hagas caso y mejor vámonos antes de que venga. —tomó la mano de su novio y se fueron corriendo lejos.
Y al final Namjoon tuvo que pagarle al mariachi por hacerle perder su tiempo.
