A la mañana siguiente...
Dormida profundamente en su regazo, Layne despertó y me vio tendida en él; me miró perdidamente enamorado y acarició con cautela y afecto mi rostro. Pretendía detener el tiempo ahí teniéndome en su pecho y viéndome dormir.
Sentí de repente sus suaves caricias en mi rostro y abrí los ojos y me encontré con sus profundos y mágicos ojos celestes viéndome. Layne me sonrió con dulzura; mi corazón se me aceleró de dicha e ilusiones.
—Hola, mi niña hermosa — le sonreí con destellos.
—Hola, mi Layne — recordé de pronto que tenía que trabajar y me enderecé abruptamente de su lado.
—¿Qué ocurre, cariño?
—Es que tengo que ir a trabajar y ya se me hizo un poco tarde.
—No te preocupes, yo puedo ir a dejarte en mi auto — le sonreí y él me devolvió la sonrisa.
Afortunadamente se había secado mi ropa. Layne la colocó junto a la estufa toda la noche.
A punto de salir, él me detuvo.
—Margarita, espera — me volteé a verle.
—¿Qué pasa, cariño? — me sonrió y me pasó su chaqueta café con flequillos.
—Ten, úsala para el frío — el corazón me brincó de felicidad y con cariño se la recibí y me la puse.
Más que rápido, salimos del departamento y nos subimos a su auto.
De regreso a su departamento, Layne se encontró con Maciel, quien lo estaba esperando y él frunció el ceño.
Al frente de ellos, se encontraba en su auto, mi padrastro observando a Layne y a su "supuesto amigo".
—Yo lo sabía. Este tipo sigue drogándose. Ya quiero ver la cara de mi estúpida hijastra cuando se entere...
—¿Qué mierda estás haciendo tú aquí otra vez?
—¡Ay vamos, amigo! ¿Por qué te empecinas en tratarme de ese modo?
—No eres mi amigo, imbécil.
—Pues yo si te considero y para que veas que no hay rencor, mira lo que te traje — sacó un paquete de cocaína de su bolsillo y se lo pasó a Layne.
Mi padrastro sonrió.
Layne miró el paquete de cocaína y se enfureció y se lo lanzó a Maciel en su cara.
—¡¿Qué te crees, idiota?! ¡Ya te dije que yo no volveré a caer en esa puta mierda!
Maciel se desconcertó y rápido se agachó a recoger el paquete.
—¡Eres un estúpido!
—¡Será mejor que te largues con tu mierda y no te me acerques más! Porque si lo vuelves a hacer, te denunciaré por acoso y por vender esa porquería — Maciel se tensó.
—Te vas a arrepentir de esto, imbécil ¡Te vas a arrepentir!
Le gritó y se alejó furioso de Layne y mi padrastro volvió a sonreír, esta vez con sorna.
—Aunque te hayas rehusado a aceptar esa mierda, yo le haré ver a mi inocente hijastra que has vuelto a consumir.
Ofuscado y preocupado, se tomó la cabeza a dos manos y ya cansado de esa jodida situación con Maciel, llamó al conserje del departamento y le pidió que no volvieran a dejar pasar a aquel delincuente.
Tensó, pensó en mí y me llamó al celular...
Yo conduciendo, me dirigía al centro para entregar correspondencia, cuando sonó mi celular, y contesté de inmediato al ver que se trataba de mi Layne. Usé los auriculares.
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Layne Staley y yo (Fanfic Layne Staley)
FanfictionLayne Staley, un cantante carismático y romántico, sale de la clínica de rehabilitación, en donde estuvo casi dos años, por su adicción a la heroína, y restituido, es alguien nuevo y libre. Ese mismo día, de camino a su departamento, choca de frente...