De mi mente al papel

Para la persona que estoy aprendiendo a amar

Es cierto que a veces me cuesta amarte, me cuesta amar esa mente que no tiene freno, que está llena de miedos, me cuesta amar tus facciones fuera del estándar de lo bello, me cuesta amar cuando haces cosas que en tu corazón sabes que está mal, cuando no eres tan buena haciendo las cosas como los demás, cuando llegas a tu límite y lloras y hieres a los demás.

Pero también es cierto que es muy fácil amarte. Amar tus rizos, tus ojos que se achican cuando sonríes. Amar lo inteligente, madura y profunda que eres pero también los sensible y empática que puedes ser. Amar la forma en la que tu mirada se ilumina cuando hablas de lo que amas, la manera en la que vez la belleza en lo rutinario. Amar como siempre tienes un hobby nuevo y regresas a ser una niña aprendiendo por primera vez. Amar la forma en la que amas, completa e intensamente.

Es por eso que te amo y no te amo pero descubro el amor inundándome pues poco a poco me encuentro amando lo que no amaba y amando aún más lo que ya amaba.

Así que estoy aprendiendo a amarte hasta que un día sin intentarlo me ponga frente a un espejo y sonría.