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▌ · ̊ ༘ ミ 𝒓𝒆𝒂𝒍 𝒍𝒊𝒇𝒆 𓂃⋆ ❛ hey dorothea. . . ❜
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📍BROOKLYN, NUEVA YORK. Viernes 10 de julio, 1998.
ANNALISE DOHERTY DIÓ LO MEJOR de ella misma para poder pasar por la multitud de gente en ese diminuto apartamento, donde se celebraba una fiesta. Se preguntó a sí misma si el anfitrión estaba consciente de que su hogar estaba lleno de personas.
Posicionó su mano arriba del vaso, cubriendo la parte superior; solo para ser precavida y que nadie le pusiera algo.
No sabía sí la gente realmente hacía eso, Annalise realmente prefirió quedarse en casa en su adolescencia, apenas salía de fiesta. Pero, de acuerdo a su prima mayor fiestera, algunas personas habían comenzado a poner sustancias en los vasos para tomar ventaja sobre ellos.
Los Backstreet Boys empezaron a sonar de fondo, Annalise suspiró, odiaba a Justin Timberlake, el tipo parecía un total idiota. Lo cuál la recordaba a su novio, Jason, el cuál la había traido a esta aburrida fiesta.
Ella conoció a Jason en la universidad, hace un año aproximadamente, pero solo llevaban tres meses saliendo. Jason no era un mal chico, pero no sabía estar en una relación. Se emborrachaba y besaba a chicas como si nada, coqueteaba diariamente con cualquiera que se le cruzara, y simplemente, no se preocupaba de sus estudios.
Y a Annalise no le gustaba eso.
Por eso mismo, había decidido que rompería con él hoy. Primero, se tomaría algo no tan fuerte para no salir afectada; segundo, armaría su discurso, y por último, rompería con él.
Aunque romper con alguien en plena fiesta no era buen plan, porque apenas llegaron a ese apartamento en el centro de Brooklyn a las diez pm, Jason desapareció. Y Annalise había pasado las siguientes dos horas tratando de encontrarlo.
"Disculpa" le dijo a una chica rubia, con la que chocó en la búsqueda de su novio.
La rubia le dió una sonrisa tranquilizadora. Doherty siguió vagando por el apartamento, se acercó a la mesa donde estaba todo tipo de alcohol y se quedó ahí unos instantes. Miró a su alrededor, maldita sea, ella no conocía a nadie y no había rastro de su novio o los pocos amigos que tenía, luego miró su vaso, vacío.
