Promesa

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Podemos observar (leer) aún pequeño niño peliverde caminando en un bosque cercano a sus hogares junto a su mejor amigo pelizeniso, ambos con una edad de no más de cuatro años estos se encontraban hablabando de cosas triviales

Izuku: Wow que suerte tienes Kachan!!, tu don es genial, espero que el mío sea tan bueno como el tuyo -dijo feliz-

Kachan: Puede ser pero seré yo el más fuerte pero puedes intentar superarme jaja -dijo también feliz-

Ambos pequeños se encontraban explorando un bosque cercano donde estos vivían, era el mejor lugar para una aventura de un día.

Los pequeños cada vez se adentraban más y más en el bosque confiados que el don del pelizeniso sería suficiente ante cualquier problema, el pequeño de las explosiones asta cierto punto lograba derribar arboles pequeños y delgados demostrando su gran capacidad con su don a tan corta edad.

Mientras que el otro pequeño tenía una gran capacidad para el análisis teniendo tan solo cuatro años era muy listo para su corta edad entendiendo problemas bastantes sofisticados.

No avía duda que ambos pequeños eran muy especiales entre si con dotes extraordinarios, solo que unos tienen mas suerte que otros...

Izuku: Kachan... P-puedo decirte algo -ablo el pequeño peliverde con su voz entrecortada-

Kachan: Dime qué pasa? -pregunto extrañado por la actitud de su amigo-

Izuku: Crees que soy un i-inutil por no tener un d-don? -dijo el pequeño soltando unas cuantas lágrimas-

El pequeño pelizeniso no sabía que aser, nunca avía visto a su mejor amigo tan afligido, el lo conocía desde muy pequeños casi son hermanos ya que sus madres son mejores amigas desde la primaria siendo que sus hijos obviamente serían mejores amigos también.

Kachan: Izuku... No digas tonterías!! -grito enojado-

Izuku: eh... Snif snif -expreso confundido por el grito de su amigo-

Kachan: No importa si no tienes un don, lo que importa es que eres alguien increíble con o sin don -dijo sinceramente a su amigo casi hermano-

Izuku no lo podía creer si mejor amigo más conocido en la zona donde vivían como el más explosivo y agresivo de los pequeños que se encontraban en su localidad, teniendo un temperamento más grande que su propia madre, lo estaba motivando, eso significaba que el confiaba en qué lograría sus metas.

Izuku: Kachan -sorprendido por las palabras de su amigo- gracias -dijo con su característica sonrisa-

Kachan: Si si, no te pongas sentimental -algo apenado por lo que dijo- ya es tarde deberíamos irnos -dándose cuenta de la hora-

Izuku: Hai, vamos a casa -dijo siguiendo a su amigo-

Ambos pequeños caminaban asia sus casas, pensando en el futuro en si serían mejores que sus padres pero...

Crack!!

Ambos pequeños escucharon como una rama se avía roto detrás de ellos, el bosque en que se encontraban era conocido por ser de los menos avistamientos de animales en el mismo ya que los animales se encontraban en una zona bastante profunda del bosque y los pequeños no eran tan tontos para adentrarse solos sin el apollo del hermano mayor de izuku y el de su otro mejor amigo el cual no pudo ir con ellos a explorar

Ambos pequeños voltearon al escuchar a alguien detrás de ellos, grande fue su sorpresa al ver de quien se trataba

Izuku: Valla nos sacaste un susto -dijo algo asustado-

Kachan: ERES ESTÚPIDO O QUE!! -grito enojado-

Shoto: Oye con esa boca besas a tu mamá? -respondió ofendido-

Corazón de piedra Donde viven las historias. Descúbrelo ahora