Satoru jamás, JAMÁS se a considerado a sí mismo como una persona insegura, para nada.
¿Cómo podría él serlo? Tenía todo lo que las personas podrían envidiar en la vida; un físico bendecido por una piel de porcelana que irradiaba su propia luz como si se tratase del mismísimo amanecer, unos ojos grandes y de un precioso color azul claro que parecían dos aguamarinas de la más fina gama, poseía un poderoso físico esbelto y trabajado por el deporte acompañado de una imponente altura de 1.90 m y por si fuera poco, un extravagante cabello blanco y sedoso cual la más pura nieve de invierno. Poseía una inteligencia digna de un genio, además la herencia de una las más grandes compañías de inversiones del país; claro, cuando su padre decidiera jubilarse, para lo cual aún faltaba un tiempo más que perfecto para que, Satoru, pudiera gozar de sus privilegios sin responsabilidades mayores a sacar buenas notas y ser un digno representante de la familia Gojo.Sí, Satoru no tenía porque sentirse inseguro en absolutamente NADA.
O bueno, eso pensaba.
Hasta ese día, en el que se enteró de que su actual y reciente novia, había salido con él...
ÉL por el amor de Dios, la única persona a la que Satoru había considerado ser alguien casi tan genial como su propia existencia.Suguru Geto, el jodido Suguru Geto.
Era un año mayor que él y, desde su primer día en la preparatoria Eaton, había reparado en él involuntariamente, y es que ¿cómo podía no hacerlo? Ahí estaba, en una de las bancas del jardín principal, con un libro en su mano, tenía una postura relajada pero muy elegante a pesar de su rostro un poco ceñido debido a la concentración en su lectura; era esbelto pero se veía ancho, masculino en toda la extensión de la palabra; vestía de en su mayoría de negro, haciendo juego con su cabello azabache un poco más largo de lo que a Satoru creía necesario pero se veía inexplicablemente bien en él. En ese momento comprendió que esa podría se quizá la única persona que él aceptaría como un igual, a pesar de ser completamente opuestos físicamente como el Ying y Yang. Irónicamente, la gente empezó a hacer la misma comparación mientras avanzaba el semestre y por alguna razón no le molestaba, más bien le parecía divertido de escuchar en aquel entonces.Pero, lógicamente no ahora. ¡Condenación!
Emergía de él un enojo irracional el que alguien mencionara por los pasillos la comparación que ahora le parecía la cosa más estúpida de la vida.Llevaba con Ireri Shoko casi dos meses de relación; la cual surgió a causa del interés de él por su puesto, Shoko era la chica más increíble de la escuela, según Satoru. Era hermosa y popular así como inteligente, sobre todo súper súper súper sexy.
Resulta que a pesar de todas estas aptitudes él no sabía de la existencia de ella el primero año de preparatoria aun cuando habían ingresado al mismo tiempo.
Satoru gozaba de una popularidad atrrasadora ademas de la atención de cada una de las chicas de la escuela, inclusive mayores que él. Así que la pobre muchacha había pasado desapercibida a su ojo. Pobre, pensaba Satoru con tristeza.
Hasta que el destino los unió en un proyecto de clase de ecología y ahí quedó encaprichado con ella.
Shoko no se veía demasiado interesada en él, era muy pragmática para involucrarse de más con una personalidad extrovertida ( excesivamente extrovertida a consideración de Shoko) como lo era Satoru Gojo. Sin embargo, tanta fue su insistencia que ella terminó cediendo sin mucha oposición.
Las primeras semanas, Satoru trataba de mantener a Shoko junto a él lo más que podía, la llevaba sus clases, la visitaba en su casa y tenían citas en los lugares donde normalmente se acostumbra. Todo iba tranquilo y perfecto según la creencia de Gojo...Para finales de su primer mes de relación Shoko había prometido hacer espacio en su agenda de actividades extracurriculares para ir a ver un entrenamiento del equipo de Basquetbol donde Gojo era el capitán. Había sido todo un reto para él convencerla de hacerlo, ya que, se tomaba muy enserio su archivo curricular, tenía que hacerlo si quería entrar a la prestigiosa facultad de Medicina de la ciudad; y como casi siempre, Satoru logró persuadirla.
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Where the blue is- Satosugu one shots
FanfictionOs de todo tipo de esta pareja que está enamorada 🫶🏻