El Ojo Negro Y La Elfa De Cristal

Acto final

El reinado de Aethon,  el Ojo Negro, había encontrado una nueva paz.  La compañía de Kai, ahora un joven  alegre y lleno de vida, le daba un propósito al rey, y el gobierno, más justo y compasivo, había ganado el cariño de su pueblo. Sin embargo, el vacío que sentía en su corazón, aún  no se había llenado por completo. 

Un día, mientras paseaba por los jardines del palacio,  Aethon  se encontró con una visión  de belleza inigualable. Una elfa, con ojos de  cristal y cabello como la noche, bailaba entre las flores.  Su nombre era Elara, y  su sonrisa,  como el  brillo  de un  diamante,  encendió una llama  en  el  corazón  de  Aethon que  no  había  experimentado en  años.

Elara,  una  embajadora  del  Reino  de  los  Bosques,  había llegado al palacio  para  negociar un  tratado de  paz. Aethon,  acostumbrado  a  la  severidad  de  las  reuniones  políticas,  se  encontró  sorprendido por  la  ternura  de  la  elfa.  Sus palabras,  susurradas como  el  susurro  del  viento  entre  los  árboles,  lo  atrapaban en  un  encanto  inexplicable.

Las  reuniones  se  prolongaron,  y  la  atracción  creció  entre  ambos.  Aethon  descubrió  en  Elara  una  belleza  interior  aún  más  radiante  que  su  apariencia  física.  Su  sabiduría,  su  compasión  y  su  amor  por  la  naturaleza  lo  conmovían profundamente.  Elara,  a  su  vez,  se  encontró  fascinada  por  la  transformación  de  Aethon,  por  la  bondad  que  se  despertaba  en  su  corazón.

Con el tiempo,  la  relación  de  Aethon  y  Elara  se  convirtió en  algo  más  que  una  simple  atracción.  Era  un  amor  profundo  y  compartido,  que  les  permitió  curar  sus  heridas  del  pasado  y  construir  un  futuro  lleno  de  esperanza.  Elara  le  enseñó  a  Aethon  a  ver  la  belleza  en  cada  cosa,  a  apreciar  la  simplicidad  de  la  vida,  y  a  abrazar  la  paz  interior  que  tanto  anhelaba.

Aethon,  a  su  vez,  le  dio  a  Elara  un  lugar  seguro  y  un  amor  incondicional.  Juntos,  gobernaron  con  justicia  y  compasión,  uniendo  a  humanos  y  elfos  en  una  alianza  que  trajo  prosperidad  al  reino.  El vacío  en  el  corazón  de  Aethon  se  había  llenado  con  el  amor  de  Elara,  y  la  historia  del  Ojo  Negro  se  convirtió  en  una  balada  de  redención,  amor  y  esperanza.
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Se que es muy corta la historia pero no puedo hacer más estoy que me vuelo los sesos pensando en nuevas ideas para nuevas historias

Ufff en fin espero que les guste está pequeña pero interesante historia dejen su estrellita y comentarios

Y si quiere aportar ideas para nuevas historias dejen sus ideas

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