Osters and wine ➣ Taejin

Capítulo 3: interés

Taehyung estaba emocionado por verlo de nuevo, había pasado toda la semana yendo a comer a la casa de Seokjin y no sabía cómo podía hacer tantos platillos diferentes. Jin era amable, demasiado propio aunque eso no le molestaba y sobretodo tenía un rostro hermoso, había aprovechado para analizarlo mientras comía y cocinaba a veces, estaba perdido por esos labios voluminosos.

—Pasa —Jin abrió la puerta y se hizo a un lado para que el menor entrará—. ¿Quieres una café?

—Me vendría bien.

Ya era algo noche, sentía un poco de frío a pesar de tener puesto su largo abrigo beige, Jungkook noto que en estos últimos días vestía más formal de lo usual e incluso tomaba ropa de su armario, Taehyung pensaba que así combinaba más con el entorno de Jin.

Ambos tomaron asiento en la sala, dejando las tazas de café en una mesita frente al sofá.

—Entonces Taehyung, estudiante de artes, vives con dos de tus amigos en un departamento cerca de tu universidad, te gusta pintar y la música, ¿Que más debería saber de ti? —la forma en que lo miraba, tan serio y penetrante lo hizo sentirse nervioso.

—Me gustan los perritos.

Jin sonrió.

—Ya veo —tomo un sorbo de café—. Luces muy tierno.

Las mejillas de Taehyung se enrojecieron, tierno, el no quería parecerle tierno, queria parecerle atractivo.

—Se tocar el piano —comento intentando disipar sus pensamientos.

—Me gustaría escucharte tocar —Jin se levantó y le tendió la mano—. Ven aquí.

Hasta el momento nada implicó contacto físico más que para saludos formales, tomo su mano y sintió como Jin entrelazaba sus dedos, su corazón comenzó a latir más rápido. Y aún más cuando noto que Jin abrió una puerta donde se encontraba un piano vertical y estaba pidiéndole que tocara algo para él.

Tomo asiento, dejo salir un suspiro y suavemente poso sus dedos en las teclas, no sabía que tocar, quería sorprenderlo pero tenía mucho tiempo sin practicar, la sola idea de equivocarse ya lo hacía sentirse avergonzado.

Seokjin sonrió cuando empezó a escuchar la melodía que Taehyung tocaba y le gustaba como el joven chico se veía concentrado.

—Preludio no. 1 —Jin identifico la canción y cuando acabo aplaudió en aquel cuarto que se había quedado en silencio.

—Me gustaba practicar con canciones de Bach.

—Y lo haces muy bien.

Taehyung relajado y orgulloso de si mismo le sonrió.

—Incluso tienes un piano de espineta —dijo sorprendido.

—Me gustan las cosas clásicas. 

—Tienes buen gusto —aseguro, toda esa habitación estaba llena de instrumentos, cuadros que seguramente valían una fortuna y un mueble lleno de discos en vinil y cd.

—La gente suele pensar que es anticuado.

Jin tomo asiento a un lado de él, el banco frente al piano no era muy grande y sentía que apenas había espacio para los dos.

—Me parece más bien sofisticado.

A Jin le parecia adorable todo lo que Taehyung le decía, eran obvias sus intenciones para agradarle.

—Tienes una apariencia hermosa —Jin tomo su mejilla.

Taehyung estaba sin palabras, le gustaba el tacto tan delicado.

—Y unos labios realmente apetecibles.

Taehyung cerro sus ojos, Jin lo estaba besando, sus suaves labios estaban sobre los suyos moviéndose de manera lenta, sin prisas y estaba fascinado.