─ ⨾ 𝗻𝗼 𝗽𝗮𝗻𝘁𝗶𝗲𝘀 𝗼𝗻 𐙚 𝘀𝘂𝗻𝘀𝘂𝗻

four

La habitación era un desastre. La ropa de ambos se encontraba tirada por todos lados junto con la lencería nueva del pequeño, la habitación olía a incienso de menta y se sentía extrañamente cálida a pesar del aire acondicionado.

— Me encantaría ser suave contigo, pero tu comportamiento de puta no me lo permite

Dijo el mayor, tomando del cuello a su niño precioso, quien suplicaba por su verga.

— Ow, p-papi

Apreciando su belleza y su delicioso cuerpo mordió su labio. Lo necesitaba.

Ambos estaban de pie, en gran cercanía el uno del otro lo que hacía fácil el que Sunoo le hiciera una mamada. El bajo su manita a su polla gorda, la cual estaba muy dura y se estremeció mirando al hombre con picardía quien soltó un suave quejido, queriendo sentir más.

— De rodillas, cariño

El menor con emoción se arrodilló. Su carita quedaba exactamente por debajo de su entrepierna. Rápidamente bajo su ropa interior dejando al aire su enorme verga. Cuando hablaba de enorme era, realmente enorme.

La aprecio por un par de segundos antes de meterla en su boquita, era tan bonita y rojiza, la punta grande estaba chorreando fluido.

— Papi tu polla es tan linda y es muy grande — dijo dulcemente, el mayor tomaba su mejilla y con su pequeña mano sujetaba su verga y la restregaba por su carita.

— Se verá más linda si la metes en tu boquita, así que adelante

El pequeño mirándolo fijo a los ojos comenzó a lamer en círculos la puntita y rápidamente su padre comenzó a jadear jalando ligeramente sus mechones castaños.

Sunoo sostuvo su polla con ambas manos y se la metió a la boca, llegando a poco más de un cuarto de esta, comenzando a succionar.

— J-Joder — soltó una atractiva carcajada apreciando la vista.

Para los que se preguntan, ¿cómo Sunoo hacia mamadas como un profesional si a penas lo había hecho un par de veces? Bueno el había practicado mucho con sus juguetes para eso. Quería estar preparado y deslumbrar a papi.

Bombeaba con sus labios y recorría con su lengua lo más que podía de su falo y cuando sintió la seguridad metió la mitad dentro. Papi parecía disfrutarlo, su cuerpo se veía algo débil, gemía sin parar, su polla estaba siendo complacida de la mejor manera.

— Mngh.. ¡nnmsgh! — los sonidos mojados que emitía su boquita eran más que espléndidos.

— Así.. eso es pequeño, mierda — dijo arrugando la nariz, haciendo su característico gesto que a Sunoo le parecía tan caliente.

La saco toda de su boca, el mayor viendo la enorme cantidad de saliva en su miembro y en la boquita del menor, el río, de verdad amaba chupar su polla, era tan suave y grande. Jugó un poco con sus bolas y con su manita masturbo toda su polla mientras daba más atención a la punta. Lamia y succionaba ansioso por que se corriera en su boquita deseando con todas sus ganas probar una vez más su leche.

— Mmghsh.. papito.. quiero probarte más

Miraba con una atención calculada sus movimientos. Sus labios gorditos y pomposos al rededor de su gorda verga, sus grandes tetas, podía ver sus pequeños pezones rosaditos estar erectos por el frío, su suave cabello castaño y sus hermosas facciones. Era estúpidamente perfecto.

— Quiero que tragues todo, ¿lo harás? — dijo con su ronca voz, el asintiendo feliz.

Sunoo lamió como un cachorrito con sus manos abajo mientras su papi masturbaba con fuerza su polla, el esperaba por su corrida sediento. Lo ponía tan nervioso verlo, el era tan grande.