𝐌𝐞𝐧𝐭𝐚𝐥 𝐀𝐬𝐲𝐥𝐮𝐦|| 𝚉𝚑𝚊𝚗𝚈𝚒

ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ ᴛʀᴇɪɴᴛᴀ ʏ ᴜɴᴏ

Tan pronto como escuché el nombre de JiYang, le envié un mensaje de texto a LuLu para hacerle saber lo que estaba pasando y corrí rápidamente al hospital.

Todo el camino comencé a pensar.

¿Y si JiJi estaba muerto de una manera espantosa? ¿Sería capaz de salir del trauma?

Cuando llegué al hospital, la recepcionista me dijo que había tenido lesiones. JiYang estaba apoyado contra la cama, conectado a la vía intravenosa, con una gran venda en el cuello. Sus ojos estaban llenos de lágrimas y parecía agotado.

Me sentí tan aliviado de verlo con vida que fui a sentarme en la silla junto a su cama.

── JiJi, ¿qué pasó? ─pregunté.

Parecía estar en una especie de shock.

── Fui atacado. ─Ahogó una respuesta. Miró la distancia, como si viera algo que no existía. ── Sólo iba a traer un medicamento para un paciente. Estaba oscuro, así que encendí las luces y, cuando fui al gabinete, alguien me golpeó por detrás. Cuando recuperé la conciencia, me estaban arrastrando de mi tobillo ─ él dijo y luego sollozó histéricamente, apretando mi mano con fuerza. ─ Estaba tan asustado, Yibo. ¡Pensé que iba a morir!

Intenté consolarlo, pero sus sollozos eran incontrolables.

» ── Le di una patada fuerte, pero era más fuerte. Había sangre por todas partes. Era un cuarto oscuro y frío  ─ él chilló.

── ¿Quién fue, JiJi? ─ pregunté. ──¿Quién te hizo esto?

Él estaba diciendo algo incoherente, no podía entender nada. 

─ Me habría matado...

── ¡JiYang, tienes que recordar quién lo hizo!

Él me miró directamente a los ojos. 

─ Fue Xiao Zhan.

No tenía ninguna duda en mi mente de que era Sean a quien JiYang se refería cuando dijo el nombre de Zhan. Definitivamente, no era consciente de los gemelos.

Todos asumieron que Sean estaba muerto, así que era obvio que Zhan era el culpable. La rabia corría por mi cuerpo.

¿Cómo pudo Sean hacerle esto a su propio hermano? ¿No había sufrido, Zhan, lo suficiente?

Si esto continua, Zhan podría ser ejecutado por delitos que no había cometido. Sean estaba muerto para el ojo público.

Me quedé con JiYang hasta la noche y, cuando se quedó dormido, salí para tomar un café. Vi a ZiYi regañando a un pobre asistente médico. Cuando me vio, sus expresiones se volvieron relajadas.

── Yibo ─ se me acercó.

── Doctora Meng.

Nunca lo llamaba así a menos que estuviéramos en compañía de los superiores.