Capítulo 10

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— Vamos — se queja Harumi mientras estira la espalda y estira las puntas de los pies para levantarse unos centímetros más y alcanzar el frasco de hojas de té que está en el estante superior

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— Vamos — se queja Harumi mientras estira la espalda y estira las puntas de los pies para levantarse unos centímetros más y alcanzar el frasco de hojas de té que está en el estante superior. Resoplando, mueve los dedos, deseando que el frasco esté a su alcance.

— Ven, déjame traerte eso — la voz de Benimaru suena detrás de ella y ella siente su pecho rozar el suyo mientras toma el frasco y lo coloca en sus manos. Harumi se da vuelta y le lanza una sonrisa antes de prepararse una taza de té. — ¿Por qué no usaste tus alas, Harumi- Hime?-, pregunta Benimaru mientras se sienta en la mesa frente a ella.

-Bueno-, comienza Harumi, a veces me gusta intentar ser normal. Es saludable tomarse un descanso de vez en cuando y hacer las cosas de la manera tradicional. Me ayuda a recordar que sigo siendo una persona normal y que está bien tomárselo con calma-.

— ¿Sientes que no eres una persona normal, Harumi- Hime? — pregunta Benimaru con curiosidad mientras la observa mirar por las ventanas hacia el lago afuera de su casa.

-A veces. Todos me ponen en un pedestal y piensan que soy lo mejor del mundo. Como si fuera un dios o algo así. A veces puede ser agotador-, suspira Harumi, con el rostro tenso mientras cierra los ojos.

-Nunca le he dicho esto a nadie, pero me preocupa equivocarme. Todos han depositado tanta fe en mí y siento que, con mi infantilismo e ingenuidad, tomaré la decisión equivocada y haré que la gente se enoje. Intento hacer lo que creo que es correcto, pero a veces temo que lo que creo que es lo correcto, pero a veces temo que lo que creo que es lo correcto puede no serlo en realidad. Como sucedió con los orcos. Sé que sufriste a manos de ellos y lo perdiste todo y no puedo evitar pensar que te lastimé cuando elegí perdonarlos-.

Benimaru la mira sorprendido antes de extender su mano sobre la mesa y agarrarla, haciéndola mirarlo. -Harumi- Hime, nunca podría enojarme contigo por tomar una decisión desde el corazón. Entiendo por qué hiciste lo que hiciste y lo acepté. ¿Te he dado alguna razón para dudar de mí y hacerte sentir culpable?-

Harumi niega con la cabeza y él le aprieta la mano alejándola de la mesa -Sígueme-

Benimaru la conduce al lugar que ella y su hermano visitan frecuentemente y que tiene vista a la ciudad, y hace un gesto con la mano hacia la población que crece rápidamente.

-Tú hiciste esto. Sí, Rimuru- sama ha ayudado, pero sin ti y tu parte en gobernar los bosques en los que reside esto habría sido mucho más difícil. Trajiste las semillas para iniciar los campos, curaste a todos los heridos, saciaste a los monstruos del bosque y los instaste a proteger este lugar. Tú hiciste eso, Harumi.

La gente que vive ahí abajo te venera porque los salvaste. Los proteges sin pensar y los tratas como iguales incluso cuando eres mucho más fuerte que ellos. Tú y tu hermano significan mucho para todos aquí. Benimaru hace una pausa antes de decir en un susurro: -Significas mucho para mí-.

Reencarnada como ninfa ||TenSura||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora