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Era un día de verano muy caluroso y divertido entre todos.
Caballos, establos, dulces y sueños por cumplir. El hermoso aroma del pasto húmedo hacía que todos los niños se quisieran revolcar en él.

-Bien, recuerden que está es una celebración especial, el día en que dos almas se reúnen juntas- Oliver, el líder del grupo, vestía con un atuendo de sacerdote que obviamente le obligaron que se lo pusiera.

-Ya casi, ya casi...- Decía la chica de cabellos cortos de color anaranjado, y sus ojos esmeralda más abiertos que nada.

Suspiro -Momento especial dónde la señorita Emma y...- En el libro que tenía sobre sus manos, lo abrió y leyó el nombre -¿Sam?- Dijo frunciendo el ceño.

De repente, el pequeño Phillip (Phill) salía del establo montando una jirafa.

-Felicidades Emma, ¡Samy está aquí!- Dijo el pequeño Phill con su característica sonrisa.

Los ojos de Emma se inundaron de agua, ¡Su sueño se haría realidad!, casarse con una jirafa para que sea su mascota por toda una vida.

Vestida con un hermoso traje negro de sastre, una rosa rojiza en su camisa, y su cabello en melena con sus característicos pelos sobresalientes en forma de arcos, miró con ilusión su jirafa

-Esto es un sueño, ¡un hermoso sueño!- Brincaba con amor mientras veía su jirafa venir.

Ray, quién estaba a lado suyo siendo el "Damo de honor" como dijo Emma cuando le dió el famoso papel de la "Dama de honor", veía con amor a Emma, pero no se le notaba, pues su expresión neutral ocultaba todo.

-Emma se ve hermosa con esa ilusión en sus ojos- dijo Norman quien estaba a lado de Ray, era el que cargaba con un almohadón que tenía una brida para jirafas.

-Tu trabajo es sostener ese almohadón, no hablar mientras es la ceremonia- Dijo cruelmente el azabache, quien estaba totalmente celoso por su mejor amigo; que veía con ojos de amor a su querida mejor amiga.

-Ops, lo siento cariño- dijo Norman en tono molesto.

-No me llames "cariño" le das gusto a los fans del Norray- dijo Ray, con un tono de desagrado.

La ceremonia se dió a cabo.
Oficialmente, Emma y Sam serían del uno para el otro de forma de mascota y dueño. La jirafa iba a permanecer en su hogar, bajó observación, y Emma podría ir a visitarle cuando quiera.
Con gusto, Emma abrazó la pierna de la jirafa.

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༻𝑅𝐴𝑌𝐸𝑀𝐴 𝑊𝐸𝐸𝐾 2024༻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora