Epílogo

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Ya habían pasado varios años desde que Jenny y Dogday se habían ido

Las cosas habían cambiado en el pueblo, no solamente el pueblo creció, sino que la gente ahora era realmente feliz y se sentía la paz

Habían traído de nuevo gatos al pueblo para que ayudarán a controlar la población de ratones junto a otras especies que el Prototipo había mandado a matar

Se había construido otra iglesia y ya nadie hablaba sobre el Prototipo o sobre Dogday

Tn y Catnap se casaron y ahora tenían a un Mini Catnap correteando por toda la casa jugando a las escondidas

--¡Listo o no! ¡Allá voy! .-exclamó Catnap mientras empezaba a buscar al pequeño gatito negro que se escondía en una de las alacenas al lado de su madre quien cocinaba

Tn miró hacia abajo. Su hijo era un gato como su padre, pero era negro como el cabello de ella

El gatito la miró y le hizo señal de que no dijera nada. Tn sonrió y asintió mientras seguía cocinando

Catnap buscó por muchos lados hasta que entró en la cocina y vió una cola negra que se movía de un lado a otro

--¡Te encontré! .-exclamó y lo cargó haciendo reír al pequeño

Tn sonrió al ver la escena. Nunca había visto a Catnap tan feliz

--¡Hora de cenar! .-dijo ella y ellos rápidamente se sentaron en la mesa

Mientras comían, Catnap miró a su esposa ayudar a su cachorrito a limpiarse la cara y a sostener bien la cuchara

Se sintió feliz y sonrió con amor y alegría. Tomó la mano de su esposa donde había un anillo de bodas y ambos comieron agarrados de la mano

¿Quién diría que podría ser así de feliz en un pueblo que una vez estaba condenado a la miseria?

Sonriendo, estaba emocionado con el futuro y por su familia

(...)

Dogday miraba el mar con una expresión tranquila

Una tranquilidad que le costó mucho tener

Cuando se fueron del pueblo, Jenny los llevó a otro pueblo que estaba muy lejos de su antiguo hogar. Era un pueblo costero

Salir de su depresión y el perdonarse a sí mismo le llevó mucho tiempo, el permitirse a sí mismo ser feliz fue un proceso lento, pero Jenny siempre estuvo allí para él

Él la amaba tanto. Ella era un ángel para él

--Doggy~ .-oyó la voz de su mujer. Volteó y ella le saludó desde la entrada de su hogar.- ¡Hora de cenar! Hice tu comida favorita

La cola del Perro se movió en emoción y rápidamente entró a la casa, pero primero le dió un beso a su ahora esposa

Sip. Llevaban 2 años de casados, se habían tardado un poco en casarse porque él pensaba que Jenny merecía a alguien mejor, pero ella simplemente no lo dejó escapar y él no pudo resistirse a querer estar con ella

--Pondré los platos en la mesa .-dijo ella

--Nop .-dijo él.- Ya hiciste mucho, Ángel. Te vas a cansar y eso no es bueno para el bebé .-dijo acariciando el vientre de su esposa.- Quiero que nazca muy sano

--Yo también .-besó su mejilla

La cena fue tranquila y al finalizar ambos se dirigieron al sillón para escuchar algo de música en la radio

Allí, recargados el uno al otro Dogday sonrió y se sintió el hombre más feliz del mundo

FIN

FIN

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