2. Encuentro

2 1 2
                                    

El hombre, si así se le puede llamar, se levantó, cuchillo en mano, y con una voz ciceante y mal modulada, probablemente por la falta de labios, me habló.

- ... No deberías estar aquí.

Tragando el asco que su rostro me provocaba, intenté responderle con firmeza, aferrando mi propia navaja como si de ello dependiese mi vida, cosa que es probable fuera acertada.

- Este es mi territorio.- Comencé mi frase, y si bien intenté ocultarme tras una máscara de valentía, el temblor en mi voz me delataba.- Busca otro lugar para cazar.

- Tú... ¡¿Tú?!- Su voz se alzó en discordia, señalándome con su hoja, sus ojos casi saliendo de sus cuencas al romper en risa maniática, la falta de párpados haciendo que aun riéndose me mirara fijamente.- ¿Tú me quieres decir... Tú me VAS a decir que hacer A MÍ?- Logró decir tras unos segundos que se sintieron como horas.

- No me repetiré de nuevo. No vuelvas a esta zona. Consigue otro lugar para cazar y no vuelvas a mostrar tu horrendo rostro.

Tenía la sensación de que el extraño no lo haría fácil por lo que, tras unos segundos más en los que el único sonido que se oía era la lluvia afuera, que se entremezclaba con la sangre que goteaba de su cuchillo, giré yo el mismo en la posición en la que uno lo tomaría para apuñalar hacia abajo.

- ¿Horrendo? ¿Es que acaso no soy hermoso? - Su tono inestable no me terminaba de dar a entender si estaba o no siendo sarcástico al respecto, pero sí dio a entender un débil intento de distracción para posicionarse como una bestia lista para atacar.- Me mandaron a buscarte, pero ni un nombre me dieron.

- ¿Quién? ¿Eres acaso un sicario para vengar a alguien?- Rehusando sus preguntas empecé a circular a su alrededor, la mesa de centro siendo la única barrera entre él y yo, la cerámica de la tetera reflejando nuestras figuras contrarias.

- El Operador.

No hubo más palabras de su parte. En vez, cuchillo en mano embistió hacia mí como un animal encerrado cuya jaula se acababa de abrir. Su sonrisa desenfrenada y ojos desmesuradamente abiertos haciendo que sudor frío corriera por mi espalda.

No había tiempo para analizar, sin embargo. Me deslicé hacia el lado utilizando la alfombra a mis pies, y con mi mano desocupada desvié el arma desde su antebrazo, haciéndolo en vez rasgar el sofá aterciopelado detrás de mí. En otra situación, me hubiera dolido la destrucción de tan hermoso mueble, pero bueno, ya nadie lo iba a usar.

El mejor consejo que he recibido para una pelea con cuchillos es no involucrarse en una pelea con cuchillos. Muy tarde para eso. La segunda mejor opción es desarmar a tu oponente, y ese era mi objetivo. Girando mi propia navaja en posición óptima para cortar en vez de apuñalar, el filo apuntando hacia arriba, me apresuro en atacar la mano que sostenía su arma en esperanza que el dolor lo haría soltarla.

- También me dijeron que no debía atacarte, pero vamos, ¿Es que acaso esto no es divertido?

Mi vista se apartó de él por un segundo, más que suficiente para que su mano disponible me propinara un golpe con la almohada rasgada, cubriendo mi visión por un momento, dándole tiempo para recomponerse.
Saque la funda de mi rostro a tiempo para verlo lanzarse nuevamente sobre mí, y apenas a tiempo para improvisar con lo que tenía. Mi filo metálico bloqueo el suyo en su trayecto, dentando ambas cuchillas, y mi mano disponible recogió la tetera de cerámica, reventándola contra su pómulo con toda la fuerza que mi mano no-dominante me pudiese dar.

El golpe fue poco exacto, pero lo suficientemente potente como para hacerlo retroceder un momento, tambaleándose, atontado y quizá algo adolorido por los trozos de cerámica que yacían ahora clavados en su carne. Si dolor era lo que sentía, su expresión y semblante no lo demostraban, en vez soltando una risa maniática, cada vez más fuerte, llena de tanto pánico como euforia.

- Creo que eres el primero en años que se ha encontrado conmigo y ha salido ileso.- Su voz calmó su propia carcajada gradualmente, soltando pequeñas risillas en trozos de las frases que hablaba.- Una lástima que no podamos seguir, ya le estaba tomando el ritmo.

Curvé una ceja aferrando nuevamente mi arma, pero entendí pronto a lo que se refería cuando entre la lluvia y viento oí el sonido de las sirenas acercándose. Me giré a la ventana, solo para hallar una mujer que, celular en mano, había estado grabando todo.

- Mierda, mierda, mierda...- Mi boca comenzó a repetir nerviosamente a la vez que barajaba mis opciones. Podría matar a la chica, pero eso dejaría más rastros. Podría pretender que el de blanco me atacó a mí, pero no se hace cuánto que esta desconocida está aquí. Podría intentar escapar, pero no vivo tan lejos de aquí y sería fácilmente rastreado. Podría culpar al demonio, pero ¿Creerían eso? Hasta quemar todo el lugar se volvió una opción en ese momento.

- ¿Vienes?- Mis pensamientos frenéticos se vieron interrumpidos por la voz rasposa y agotada del otro asesino, quien sostenía un papel en la mano con algo dibujado y una mirada más seria. Bueno, tan seria como los cortes en sus mejillas permitieron.

Cierto, él había venido a buscarme de parte de alguien.

Mi mirada dudosa fue suficiente para provocar que él escupiera una no muy satisfactoria explicación.

- Una vez rasgue esta hoja me desvaneceré, y tú serás el único sospechoso a los dos homicidios de esta noche.- Sus ojos, inyectados en sangre, parecían reducir sus niveles de adrenalina, pero no paraban de perturbarme con su mirada.- O puedes venir conmigo y la chica será la única sospechosa, y jamás te...- Se irrumpió a sí mismo para corregir.- Jamás NOS hallarán.

Desconfiado, deslizo mi mirada de vuelta a la ventana, viendo las luces rojas y azules reflejarse en la lluvia y niebla, bañando la figura de la chica que movía sus brazos intentando llamar la atención de la policía. Su rostro, su boca abierta y la forma en la que su cuello se contraía me daban a entender que estaba gritando, más no podía hacer sentido de lo que decía. En ese momento, mi mundo era silencio.

Me giré de vuelta al pelinegro, que extendía una mano rugosa, blanqueada y herida hacía mi, su piel similar a un cuero mal procesado que reposa como una costra que cubría todo su cuerpo, y tras inhalar profundo, sujetando aún mi navaja en caso de que fuese una trampa, di un paso hacía él.

- Buen chico.- Su actitud confiada era un golpe a mi generosa paciencia, pero por ahora el era mi única salida, así que me trague mi orgullo con mal gusto y tomé su mano.

Él lanzó la hoja al aire, la cual ahora podía ver bien, tenía un símbolo trazado en ella, un círculo bruscamente dibujado, atravesado por dos líneas diagonales que se cruzaban al centro, formando una equis. No fue más que un par de segundos que lo vi cuando el brillo metálico del cuchillo rasgó a través de ella, partiéndola a la mitad.

Un pitido agudo invadió mi cabeza y sentí mi visión nublarse, junto a una fuerte jaqueca. El olor a polvo se volvió tóxico y llenó mi garganta, obligándome a toser bruscamente, y un mareo movió la tierra a mis pies.

¿Tierra?

Estabilizando mi condición tanto como pude abrí mis ojos de nuevo para toparme con una escena completamente distinta a la casa que acababa de dejar. Un suelo terroso, húmedo y cubierto de hojas secas recibió mi vista, la cual a medida que subía hallaba altos árboles, delgados, con troncos oscuros que se entremezclaban en la neblina de la distancia. Arriba, entre las pocas hojas que crecían en los árboles prontos a morir, un cielo nocturno con una luna llena presente, que bañaba el paisaje en un fulgor fantasmal.

Tras un análisis rápido del lugar, mis ojos descendieron de vuelta al desconocido que me había traído, el cual reflejaba en su poca expresividad el divertirle la situación.

- Siempre es divertido ver cómo reaccionan la primera vez.- Se relamió la falta de labios y, haciéndome un gesto con la mano, comenzó a caminar lejos de mí.- Ven, sígueme, te explicaré todo en el camino.

~ ★ ~

Y ahí tenemos ya el segundo capítulo de este remake de fanfic. La verdad se me complicó bastante el escribir la escena de pelea por el hecho de que son dos personajes con skillsets casi idénticos, pero intenté destacar bien sus personalidades en cada movimiento. En el próximo capítulo ya llegaríamos con la creepyhouse y todo el resto de personajes, para q estén atentos jsjs hasta la próxima!

"Sangre Negra" - Creepyhouse + OC ficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora