𝐭𝐰𝐞𝐧𝐭𝐲-𝐨𝐧𝐞

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danilo sánchez

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danilo sánchez

excuses

DE MÁS ESTABA DECIR QUE MICAELA, al igual que Danilo, se encontraba deprimida, en una desolación extraña: amarga y agridulce al mismo tiempo

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DE MÁS ESTABA DECIR QUE MICAELA, al igual que Danilo, se encontraba deprimida, en una desolación extraña: amarga y agridulce al mismo tiempo. Triste pero con una bronca acumulada increíble. ¿Acaso eran todas estas emociones posibles? ¿Estas extrañas combinaciones eran normales, acaso el contrario se sentía igual que ella? ¿Él sabría gestionar estas emociones mejor?

Entre pensamiento y pensamiento, agobiada, se debatia internamente si debía comprobar la salud de su pareja. Dudaba si estaría en una sola pieza y justo por eso temía averiguarlo. Temía hacerlo y otra vez confirmar que él no podía valerse por si mismo.

No podía imaginar otro escenario más que al castaño enojado con ella, con su actitud egoísta que se contuvo a ayudarlo cuando peor se encontraba. No obstante no podía estar más equivocada. Si existía algo que Sánchez anhelara con su corazón entero, era reconciliarse con ella.

Largó un extenso y sonoro suspiro, que rebotó por toda la habitación y volvió por sus oídos. Acomodó su desordenada cabellera mientras se veía al espejo e inspeccionaba su desgastado aspecto. Sabía que no estaba en su mejor momento, que era notorio el hecho de que estaba algo demacrada y que no podía evitar trasnochar constantemente.

Le restó importancia como solía hacer últimamente con su vida en general y se dirigió otra vez a su salón. Uno que le remarcaba la ausencia, dado al silencio, que abordaba la muchacha.

Aproximadamente unas dos horas después se encontraba en la salida del colegio, aferrada a su blanquecina mochila en un acto de nerviosismo.

Siempre, sin excepción, se sentía muy nerviosa a la hora de estar en la calle. Al menos cuando se encontraba sola, lo que era lo más común en su rutina. Y pensar en ello fue como una puñalada directo al corazón. Tenía presente que con Danilo no tendría que preocuparse, no pasaría por ese estado de miedo porque él estaría ahí. Bastantes ejemplos tenía en la que la había defendido sin dudar ni chistar.

BARDERA  𝒇𝒕. danilo sánchezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora