Trash - Yoonmin

Cap 21

Jimin se encuentra en los casilleros de la universidad, tratando de concentrarse en sus estudios, pero su mente sigue divagando hacia Yoongi y sus sospechas. De repente, Taemin se le acerca.

— ¡Hey! ¿Cómo va todo? —pregunta Taemin, abriendo su casillero junto al del rubio.

— Bien, supongo. Oye, Taemin, ¿conoces a Yoongi? —pregunta, con una mezcla de curiosidad y preocupación en su voz.

— Sí, claro. Hemos coincidido en algunas clases. Es un tipo interesante, aunque un poco enigmático —responde Taemin, mirando al rubio con interés.

— Sí, esa es la palabra. Enigmático. Hay algo en él que no termino de entender —dice el rubio, cerrando su casillero lentamente. Taemin asiente, notando la seriedad en el rostro del rubio.

— Bueno, a veces solo necesitamos tiempo para conocer realmente a las personas. Quizás deberías pasar más tiempo con él y descubrirlo por ti mismo —sugiere Taemin, dándole una palmadita en el hombro antes de marcharse. Jimin se queda pensativo, sabiendo que su amigo tiene razón.

El grupo de amigos decide pasar un día en el parque de diversiones cercano a la universidad. La emoción está en el aire mientras se acercan a la entrada.

— ¡Esto va a ser divertido! No puedo esperar para subirme a todas las montañas rusas —dice Jungkook, con una sonrisa de oreja a oreja.

— Sí, necesitamos un descanso de tanto estudio —añade Namjoon, ajustándose las gafas.

Mientras todos se dispersan para decidir a qué atracciones subir primero, el pelinegro se encuentra con Jin, su manager, cerca de una de las casetas de comida, de manera casual.— Jin, ¿qué haces aquí? —pregunta el pelinegro, sorprendido.

— Vine con unos amigos y te vi por casualidad. No pensé que te encontraría aquí —responde Jin, sonriendo—. ¿Cómo estás?

— Bien, disfrutando del día con los chicos. Oye, ¿quieres dar una vuelta? —propone el pelinegro, sin pensar demasiado. — Claro, suena bien —acepta Jin.

Los dos se alejan un poco del grupo y comienzan a hablar en voz baja sobre las nuevas canciones y las próximas presentaciones. Mientras tanto, el rubio, que se ha separado momentáneamente del grupo, los observa desde la distancia, notando lo cerca que están y la intensidad de su conversación.

— ¿Qué están tramando esos dos? —murmura para sí mismo, sintiendo una punzada en su estómago. Taehyung, que estaba cerca, lo nota.

— ¿Te molesta que Yoongi esté hablando con ese chico? —pregunta Taehyung.— No, no es eso. Solo me parece... curioso —responde, intentando restarle importancia.Taehyung sonríe con pillería. — Seguro, como digas.

Después de un rato, Jin se despide del pelinegro y se marcha. Jimin, fingiendo casualidad, se acerca al pelinegro justo cuando Jin se va.

— ¿Todo bien? Parecía que tenías una conversación seria con ese chico —pregunta el rubio, tratando de sonar despreocupado.

— Oh, sí. Es solo un amigo con quien comparto algunos intereses musicales —responde el pelinegro, sonriendo.— Qué bien. Oye, vamos con los chicos, nos esperan —dice el rubio, esperando que acepte.— Claro —responde el pelinegro, asintiendo.

El grupo se sube a varias atracciones juntos. Se montan en la montaña rusa, los autos chocadores y luego deciden probar la casa del terror. Durante cada atracción, el rubio siente una conexión creciente con el pelinegro, disfrutando de su compañía más de lo que esperaba. Entre risas y adrenalina, ambos se van acercando cada vez más.

Entran a la casa del terror, una atracción famosa por sus sustos y efectos realistas. En el interior, las luces son tenues y los sonidos espeluznantes llenan el aire. Al poco tiempo, el grupo se dispersa involuntariamente debido a los pasadizos laberínticos y los efectos sorpresa.

— ¡No me gusta esto! —exclama el rubio, aferrándose al brazo del pelinegro.

— Tranquilo, estoy aquí —responde el pelinegro, intentando calmarlo mientras avanzan.

Ambos caminan juntos, encontrando sustos en cada esquina. En un momento, un actor disfrazado de monstruo salta frente a ellos, haciendo que Jimin suelte un pequeño grito y se esconda detrás de Yoongi.

— No te preocupes, solo es un actor —dice, sonriendo.— Lo sé, pero aún así me asusta —admite, riendo nerviosamente.

Mientras avanzan, los dos se sienten cada vez más cómodos el uno con el otro. El pelinegro guía al rubio a través de los pasillos oscuros, enfrentando juntos los sustos y riéndose de sus propias reacciones.

— No esperaba que fueras tan valiente —comenta Jimin, admirando la calma del pelinegro.— Bueno, alguien tiene que serlo —responde Yoongi, guiñándole un ojo.

Se oyen gritos a lo lejos, probablemente de Hoseok y Taehyung, lo que hace que el rubio y el pelinegro se rían aún más.

— Parece que no somos los únicos asustados —dice Yoongi, sonriendo.— Definitivamente no —responde, riendo.

Después de lo que parece una eternidad, finalmente encuentran la salida de la casa del terror. Ambos salen riendo y respirando aliviados.

— Eso fue intenso —dice, todavía recuperándose del susto.— Sí, pero lo logramos —responde, dándole una palmada en la cabeza muy suavemente.

Después de pasar el día disfrutando de varias atracciones juntos, Jimin y Yoongi se reúnen con el resto del grupo.

— ¡Ahí están! Pensé que los habíamos perdido en la casa del terror —dice Hoseok, riendo.— Solo nos tomamos un descanso en el terror —explica el rubio, sonriendo.

— Fue un gran día. Deberíamos hacerlo más seguido —añade el pelinegro, asintiendo.

— Sí, sobre todo porque los exámenes se acercan la próxima semana —comenta Namjoon, con una mezcla de emoción y preocupación.Mientras todos se dirigen de regreso a sus casas, Jimin siente que sus sospechas sobre el pelinegro no son tan importantes como antes. Lo que realmente importa es la conexión que están desarrollando, y está decidido a disfrutar cada momento con su nuevo amigo, sin importar los secretos que aún puedan existir.