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𝑺𝒂𝒕𝒖𝒓𝒏𝒐
════ ⋆★⋆ ════❞𝑬𝒓𝒂𝒔𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒗𝒆𝒛 𝒖𝒏𝒂 𝒉𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂 𝒇𝒆𝒍𝒊𝒛...
𝒀 𝒂𝒉𝒐𝒓𝒂 𝒆𝒔 𝒔𝒐𝒍𝒐 𝒖𝒏 𝒄𝒖𝒆𝒏𝒕𝒐 𝒅𝒆 𝒉𝒐𝒓𝒓𝒐𝒓❞El jóven rey de Auradon se encontraba en su gran castillo dorado, sentado en un sillón azul de su misma habitación, sostenía una foto de su amada Mal en manos, las lágrimas corrían por sus mejillas involuntariamente y los recuerdos llenaban su mente sobre la chica que tanto amo, cuando fue interrumpido por su madre la cuál acaricio su mejilla
—Debes aceptarlo hijo...—Se animó a decir Bella finalmente cuando su hijo la miro a los ojos
-—No puedo, Madre... No puedo...— Respondió Ben con una voz sumamente afligida, alzó su mirada hacia su madre la cuál pudo ver el dolor que los ojos de su hijo reflejaba
—A ella no le habría gustado verte así... Llorando, sin comer... Sin salir...—Bella pone su mano sobre la de Ben con la cual sostenía la foto de ambos
—Lo sé... Pero aún no puedo creer que ella ya no este a mi lado... —Conforme Ben hablaba el dolor era más notorio en su voz, la muerte de Mal lo había dejado realmente afectado
—Nadie lo esperaba, cariño... Pero la vida sigue... Y tu debes de estar listo para hoy...—Responde Bella, Ben suspira y limpia sus lágrimas con la palma de su mano
—Si... Si, estaré abajo enseguida...—Respondió ya mas tranquilo, aunque eso no quitaba que seguía doliendo
—Esta bien... No tardes—Responde Bella poniéndose de pie para finalmente salir de la habitación de Ben
Este al ver que su madre salió de la habitación dejándolo sólo camino hacia la cómoda de su cama para sacar una pequeña cajita de su cajón, el anillo de compromiso que alguna vez fue de su amada Mal, ahora estaba de nuevo en aquella caja...
Lamentablemente estaba ahí desde hace casi 6 meses exactamente, y seguía doliendo como el primer día para el Rey y los amigos de Mal, incluyendo a sus padres, suegros y su reino.
Y jamas dejaría de doler, seria una herida que estaría abierta por siempre.
Continuará
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𝑺𝒂𝒕𝒖𝒓𝒏𝒐 | Descendientes
FanfictionCuando Ben le pidió matrimonio a Mal, creyó que todo sería fácil, que el reino la había aceptado por completo, más no contaría con que la tragedia llegaría a su vida de una forma tan repentina e inesperada.