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│ - ¿Qué haces aquí? ¿Qué sucedió con San Francisco?
│ - Decidí que no podía dejar Gotham. Que no podía dejarte a ti
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Portada realizada por. TheFirstDragon de la Editorial_Silver
Actualizaciones cada. M...
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— Señorita Wayne. El Jet esta listo para ir a Gotham — dijo una azafata
— Si. Quiero salir de esta maldita ciudad lo antes posible —
— Antes de abordar su padre le mando una cosa para que se sienta más cómoda con su regreso — la señorita me entrego una bolsa qué en su interior contenía un teléfono
— Claro. Vámonos — tome mi maleta y subí al Jet
Al despegar contemple la vista, era hermosa pero deseo no volver a pisar este lugar nunca más
Recordé que Bruce me dio un regalito así que lo abrí y de inmediato prendí el teléfono, se sentía raro, hace mucho no tenía uno en mis manos
Cuando el teléfono se encendió, vi que el fondo de pantalla era una vieja foto de mi madre y mía, lindo gesto de su parte supongo
Me quede dormida y tuve las pesadillas de siempre pero esta vez era más caótico y sangriento, me desperté sudando frío y con la respiración agitada
— Señorita. ¿Se encuentra bien? —
Mire a la azafata e intentaba calmar mi respiración — Si. Si estoy bien —
La azafata me extendió un vaso de agua de inmediato entendí sus intenciones y de mi bolso saque mis pastillas para la "felicidad y la calma" y me las tome con el agua, en un par de minutos me relajaron y volví a dormir, al despertar ya estábamos aterrizando
Cuando salí respire profundo el olor a corrupción y muerte en la ciudad — Como te extrañe Gotham — camine en dirección contraria al auto que me estaba esperando
— Señorita el auto esta por acá — dijo la azafata nerviosa
— Lo se — camine hasta una esquina del lugar donde hace años escondí una moto, me puse el casco y encendí la moto qué para mi suerte tenía gasolina — Que lleven mis cosas a la mansión Wayne —
La noche estaba envuelta en una bruma oscura, conducía por las calles de Gotham sin ningún destino fijo solo queria sentir el viento frio helarme hasta los huesos. Termine en una parada muy conocida para mi de cuando era más joven, al parecer mi proveedor aun vendía, compre solo un poco
Conduje hasta llegar al frente de la imponente mansión Wayne, no recordaba que este lugar fuera tan lúgubre. Al bajar empecé a sentir una abrumadora mezcla de emociones que me invadían. Tome valor y abrí la puerta, al entrar todo seguía igual que como cuando me fui, los mismos colores obscuros, esas cortinas qué trate de incendiar por feas y sobre todo el aura de melancolía qué cubría la mansión por completo
