Temprano esa Mañana

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Es de conocimiento común que las mañanas dentro del santuario siempre han sido excéntricas, con 11 jóvenes santos vibrantes de energía, por supuesto, se les nota a unos mas que otros, como cristal cuando escorpio y leo despeinan al que debe ser el lemuriano mas cansado de todos los tiempos, en su carrera por llegar al coliseo, seguidos de cerca por un preocupado hermano mayor, y detrás de esos 3 el resto de los caballeros, sin sus armaduras, pero listos para entrenar, pasan sonriendo burlona mente la primera casa, piscis sin embargo, se detiene unos segundos y extiende un peine al carnero, quien resopla y los sigue.

-JA, pierdes de nuevo Aioria- dice Milo juguetón, viendo al león esponjar su fantasiosa melena en indignación.

-Cállate Bicho rastrero- empuja leo, golpeando al escorpión por el hombro.

Milo lo ignora por dos segundos antes de lanzarse hacia Aioria, quien ya lo esta esperando con las manos en alto, atrapa los puños del contrario y se empujan uno a otro, sus cosmos empiezan a responder a la "batalla" elevándose levemente.

-NOnononono, Sin cosmos , reglas básicas y no olviden estirar antes de pelear así- Energía de hermano mayor, vibras de hermano mayor, es un hermano mayor, en todo sentido, que se le podía hacer al buen sagitario, si no regaña a alguien no es feliz.

- Mira nomas, porque no podías ser tantito como Aioros eh?- Saga levanta una ceja escéptico con su super postura de :soy mas maduro que todos ustedes, y tragándose la necesidad de exigir café para pasar la mañana, cara acompañada de la postura "cansado de la vida" que conciste en estar recto y rígido como tabla, cruzar los brazos y mirar a todos por encima de su hombro.

Organizarse para entrenar es mas sencillo de lo que se espera de los santos dorados, pues, para cuando los caballeros de plata llegan a entrenar, ya hay combates amistosos entablados en cada esquina con Saga y Aioros supervisando cada uno. A punto del medio día cesan los entrenamientos, porque que loco querría medio matarse entrenando a 40°, a partir de las 3 pm el entrenamiento cambia, por turnos elevan su cosmos equilibradamente, trabajando los controles mas finos, terminan una hora antes de que el sol se oculte con Afrodita con un precioso rosal creciendo frente a el, Aioria tiene mini replicas de sus relámpagos entre sus manos y Shura con una muy bonita replica de un cerezo tallado en una de las columnas del coliseo.

Comienzan a despedirse del lemuriano cuando, una sensación ligeramente invasiva se apodera de su mente.

-Caballeros, se les solicita en el templo principal.

- quest'uomo non rispetta le pause (este señor no respeta los descansos)- dice mientras ya apresura el paso hacia el templo, con hombros encorvados.

-Angelo!!, que sea la ultima vez que te escucho hablar así del patriarca- Cancer en cuestión rueda los ojos entre divertido y hastiado.

- Y cuantas veces te he dicho que no digas ese nombre, mi apodo es Mascara de Muerte- Se voltea dando ese clásico gesto italiano con la palma hacia arriba y juntando las puntas de sus dedos- vecchio.

-Tu apodo sera chamaco malcriado si sigues actuando como uno.

Y la pelea continúa mientras atraviesan los templos, con el rápido asalto a la cocina de Dohko, que termino con un templo sin frutas y la promesa de ser los siguientes en prestar sus cocinas, avanzando a velocidad y con el estomago lleno es fácil pasar por alto unos cuantos grados menos en el ambiente, hasta que los pies de alguien crujen y astillan una fina capa de hielo en el suelo.

El onceavo templo se alza orgulloso sobre ellos, el único con un frente circular y lleno a montones de escarcha, por periodos aire helado se escapa desde dentro, como si la casa misma exhalara poder, todos titubean un poco antes de seguir, se siente amargo cruzar sin su protector, la entrada a la plaza personal del caballero que debería habitar este templo siempre es la parte mas difícil, la cloth de acuario descansa dentro, o eso se cree, pues aun que no halla nada mas que pueda causar que el templo este en estas condiciones, nunca nadie la ha visto, solo saben de su apariencia por Dohko y el patriarca, quienes compartieron una vida con su santo anterior, es tierno verlos recordar a sus camaradas de tiempos lejanos, pero no suelen preguntarles seguido, tiende a dejarlos con un aire melancólico.

Pasan con la cabeza baja, sin chistar, guardando respeto por alguien que no esta ahí.

La caminata es notablemente mas tranquila después de eso, las flores de Afrodita, o sus bebes como el suele llamarles, se abren para ellos, dando paso y cerrándose cuando el ultimo sale del camino, entran al templo principal, acomodándose en media luna rodilla al suelo ante su diosa.

-Mis queridos caballeros- Dice la diosa Athena, también conocida como Saori Kido, saludando a sus santos con pesar en su mirada, un poco despeinada y si te fijas bien, sus manos tiemblan un poco, la vista inquieta a sus caballeros, por que, que podría tener en estas condiciones a la mujer, porque antes mujer que diosa, con 87 caballeros preparados para dar sus vidas por ella y su causa, es en verdad sencillo olvidar que solo tiene 16*.

- Hace 3 semanas llegaron informes al santuario, un llamado de auxilio, de un pueblo al sureste de Siberia- Con gracia Saori se levanta y comienza a dar vueltas sobre el pequeño palco de su trono, sus tacones bajos suenan en el gran espacio.

-Estos informes hablaban con saña sobre una criatura, una bestia que tenia aterrorizados a todos en un pueblo al este de Siberia, por ello, le encomendé la tarea de investigar a un caballero de plata, Asterion de Hound, sus reportes de misión debieron llegar hace dos semanas, en cambio solo obtuvimos un sepulcral silencio, envié otros dos caballeros de rescate, quienes lo encontraron herido en su misión de regresar al santuario, utilizando mi cosmos y la habilidad de mi patriarca,  los traje hasta aquí- con un suspiro se volvió hacia sus santos.

- Hasta hace dos días, sus heridas lo tenían en reposo inducido y apenas abrió los ojos me contó lo que vio, Asterion describió a la criatura como una figura similar a una persona, con un aura gélida y curiosa, lo rodeaban pares de ojos rojos, alzo su cosmo para presentarse, pero, fue malinterpretado, en un segundo, lo que el describe como nada mas que nieve afilada, lo dejo fuera de combate.

Las palabras hicieron eco en el salón, ¿porque todo esto era tan importante? como para mantener así de informada a la élite,

-Mi señora, ¿Como es que un caballero de plata fue tomado por sorpresa?- Dijo Tauro quien fruncía el seño.

- Ese es el asunto Aldebaran, Hound no arremetió ante el extraño, porque lo confundió con uno de ustedes.

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Y oficialmente estamos de vuelta, estaré bajando los capítulos restantes para volverlos a publicar reescritos.

* Canónicamente Saori tiene 13 años, para fines mas realistas aumente la edad a todos los personajes, y, en medida de lo posible, los dejare actuar según esta misma.

Se despide

-CameliaLunar

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