𝘼𝙍𝘾𝙊 ² ☢︎ Capitulo 13

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ADVERTENCIA ⚠️:

SPOILERS DE LA NOVELA DE CODE NAME ANASTASIA.

Ambos se miraban fijamente, Taek-Joo trataba de recuperar el aire que perdió mientras esperaba que el rubio lo soltará. Ya no tenía caso seguir, ya no tenía caso seguir esperando por algo que jamás llegaría.

Aquella noche entendió muchas cosas, aquella noche entendió su lugar, en aquel momento todas las piezas del rompecabezas se armaron.

Ya no tenía nada que hacer al lado de Yevgeny. Zhenya lo lastimaba, y el se lastimaba aún más al aferrarse a una mentira, a una ilusión creada por su corazón enamorado.

Se armó todo un cuento de hadas en su mente, un cuento que no tenía caso, se rompió en el mismo momento en que Zhenya le dijo que no lo amaba. Pero siguió aferrado a la idea de tener un matrimonio dulce.

Recibió a cambio un matrimonio Doloroso.

Recibió oscuridad antes de luz.

Recibió desprecio antes de amor.

Recibió golpes antes de caricias.

Recibió maltratos antes de mimos.

Recibió infidelidades antes de fidelidad y lealtad.

Todo lo que recibió fue desprecio.

Recibió lágrimas antes de sonrisas.

Recibió desilusiones antes de ilusiones.

Su corazón estaba roto. No creía volver a amar a alguien con tanta euforia como lo había hecho con Yevgeny.

Se decía que te enamoras de una persona, las demás veces solo buscas sentir lo mismo con diferentes personas y momentos de tu vida.

Taek-Joo no estaba de acuerdo en eso.

Taek-Joo no estaba listo para amar de nuevo. No creía amar de nuevo. No creía que el amor mereciera entrar en su vida nuevamente.

Taek-Joo miraba fijamente a Yevgeny que aún lo seguía observando. Hasta que noto la pequeña sonrisa en el rostro angelical del rubio.

— Jamás, óyeme bien, jamás te dejare ir. Eres mi esposo, eres mío. Y será mejor que lo aceptes.

Zhenya se levantó rápidamente para tirar el cuerpo del moreno sobre su hombro y caminar nuevamente a la mansión.

A pesar de haber corrido desde el cuarto de Taek-Joo hasta donde estaba su esposo, su respiración seguía igual. Por fuera, Zhenya parecía tener todo bajo control. Pero, por dentro sentía sus emociones inestables.

Por un lado sabía que le estaba lastimando al moreno con sus actitudes jodidas, pero no podía dejarlo ir tampoco. En el pasado, hubiera estado feliz de haber aceptado separarse del moreno pero ahora, ahora se dió cuenta del hombre que tenía al lado suyo.

Taek-Joo le había probado que confiaba en él, que lo amaba no por su dinero ni por su apellido, sino por quién era. Acepto la clase de mierda que era, le dió amor, devoción y lealtad invaluable. Jamás encontraría a alguien como Taek-Joo.

No estaba dispuesto a dejar que se marchara. Que se alejara de su vida.

Cuando vio por el gran ventanal como el moreno corría rápidamente, sintió su corazón latir apresuradamente en su corazón. Sintió un miedo demasiado fuerte al pensar en quedarse solo, en estar sin Taek-Joo.

Cuando ambos volvieron a la mansión, Zhenya dejo en su cuarto al moreno y él, se encerró en el suyo.

El moreno miró la situación indiferente mientras se levantaba y preparaba la bañera para darse una ducha y dormir cómodamente.

Mientras dejaba que la bañera se llenará con agua caliente y la espuma se iba formando gracias a los jabones y las sales, el moreno tomo un bolígrafo de color rojo para tachar en su cuaderno el Plan de escape 1.

Y hacer un redondel de color violeta al número 2.

Escondió el cuaderno para cerrar la puerta del baño con delicadeza y empezar a desnudarse.

Zhenya se sentía cansado

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Zhenya se sentía cansado. Pero no por el sueño, sino más bien por la situación en si.

Día tras día estaba alerta y trabajaba en la mansión ahora para estar más pendiente al moreno. Pensaba que si se descuidaba un segundo, Taek-Joo ya no estaría con él.

Ambos empezaron a jugar. A pesar de todo pronóstico en contra de él, Taek-Joo se acercó con juegos de mesas, cartas, y retos para proponerle tratos. La misma condición de él jamás cambiaba; Su libertad.

El en cambio pedía cosas distintas. Citas, leer libros al aire libre, sexo, juego de roles, dormir con él y más sexo.

Zhenya se divertía, pero en una partida de Piedra, Papel o Tijera cuando Taek-Joo había ganado m, tuvo que cansarlo con algo; Sexo. Lo tomo en toda posición posible hasta que el sol se ocultara, y solo así lo dejo en paz. Solo para ver cómo el moreno se esforzaba en llegar rápidamente a la puerta de la enorme mansión para irse.

Zhenya cada vez más sentía nervios en ver cómo el moreno se esforzaba en marcharse de su lado. A solo un minuto, el sol se oculto dejando un cielo completamente oscuro. Y solo así, el rubio pudo respirar nuevamente.

Cuando susurro que el moreno perdió, el moreno se desmayo del cansancio.

Lo cargo, lo baño y lo arropó mientras veía el rostro hermoso del moreno. Tenia mucha suerte de haberlo encontrado antes que cualquiera otro.

El rubio cerró sus ojos mientras se abrazaba al moreno, antes de dormir susurro el sobrenombre del moreno para descansar por fin.

Los retos aumentaban, los juegos también y en cada juego el moreno perdía pero aún así no perdía la esperanza de algún día ganarle a Zhenya.

Aún tenía planes para seguir intentando. En seguir armando formas posibles de escapar de allí y seguir su vida.

Zhenya amaba la nueva personalidad del moreno, era alguien serio, tranquilo y no hablaba demasiado. Pero en días nublados, con lluvia sonreía triste mientras extrañaba al anterior Taek-Joo.

No es como si Taek-Joo hubiera cambiado tanto. Solo en su personalidad y en como hablaba, a veces, le gustaría volver al pasado y golpearse por el daño que causó en el moreno.

Desde aquella noche, cambiaron las cosas y jamás, podría volver atrás y tratar de cambiar las cosas.

No había manera de que Taek-Joo lo perdonará, pero si podía ganárselo. En esta vida nada es gratis.

Estaba dispuesto a intentarlo.

Hasta que llegó su hermana.

𝗠𝗔𝗧𝗥𝗜𝗠𝗢𝗡𝗜𝗢 𝗗𝗢𝗟𝗢𝗥𝗢𝗦𝗢 [ᴢʜᴇɴᴊᴏᴏ: ᴄᴅ:ᴀ] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora