ocho

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Mataron 3/4

Los días pasaban entre entrenamientos y exámenes sorpresa, oficialmente freen y becky llevaban dos semanas juntas, aún ningúna había pedido a la otra ser su novia, pero poco faltaba para eso.

-Tengo más de dos meses de conocerte, hemos tenido sexo muchas veces y nunca he ido a tú casa.- Se quejaba la pelinegra, caminaban hasta una pizzería de la mano de la castaña.

-¿Para qué?.

-No lo sé, que tal el gobierno borra tú memoria y no me recuerdas, tendría que ir a hacer que me recuerdes, y no sabría tú dirección.

-Bueno, obviamente no te recordaría si borran mi memoria, duh.

-A eso me refiero.

-freen...Solo quieres ir para burlarte de la habitación de irin, si si tiene en la pared varias fotos de tú amiga.-Soltó becky sabiendo que era lo que freen quería ir a investigar.- Ella no me cae bien, irin es una bebé, no quiero que le haga nada malo.

-Solo le besará el clítoris.- Se encogió de hombros mientras reía.

-¡Freen!, estamos en la calle, puedes ser un poco explícita.

-Bien...- Se quejó entrando a la pizzería.

Becky miraba a freen, sin darse cuenta la estaba analizando mientras esta comía una porción de pizza. Últimamente había estado comiendo más, muchas veces becky había tenído que cargar una que otra pastilla contra las náuseas en toda la semana pasada, la pelinegra había estado sufriendo, según ella porque su periodo se acercaba y siempre se ponía un poco mal unos días antes.

-Deja de verme así, parece que estuvieras teniendo fantasías sexuales. - becky rio ante su broma.

-fini, solo te estaba mirando, las fantasías las dejo para la noche.

-Almenos tienes un horario.- Se burlo.

-Últimamente haz estado muy sarcástica, pero solo conmigo.

-heng dice que ahora ya no lo puedo molestar a él, dice que te tengo a ti.

-Ese traidor.

-Dejalo, es feliz, creé que irin coquetea con él.

Becky:

-¿Irin?.- No pude evitó reír ante tal tontería, me calmo un poco cuando mi celular comenzó a sonar.-¿Hola?.

-becky, hoy saldremos con irin a visitar a Walther, ¿Quieres ir?.-Me pregunto Gordon al otro lado de la línea.

-No, hoy quiero dormir temprano, vayan con cuidado.-Respondí guiñandole el ojo a freen que rio bajo.

-Bien, cuidate también. -Colgó.

-Adivina quién tiene casa sola.

-Yo no...- Repondio con sarcasmo, la miré mal.-Okay nada de sarcasmo.

-Tengo casa sola, ¿Quiéres ir?, a ver una película.-Me adelante a decir antes que pensará mal.

-Si, solo me llevas a casa antes de las ocho.- Explicó viendo la hora en su celular.-Tengo hambre.- Se quejó mirando su plato sin nada.

-Te acabas de comer dos porciones de pizza...

-Soy tú...- Se quedó en silencio y yo sonreí al darme cuenta lo que estuvo apunto de decir. -El punto es que tienes que alimentarme, estaba en el contrato. -Bromeo.

-No recuerdo haber firmado nada, pero igual llevaré una para ver la película, espérame aquí.- Tomé mi celular de la mesa y hice mi pedido.

-Oye...¿Esa chica es tú amiga?. -Me preguntó uno de los chicos del mostrador, mirando a freen de una manera que me hizo querer golpearlo.

-Si...- Respondí tratando de calmarme.

-¿Podrías darme su número?.

-¡Es mi novia idiota!. -Solté con odio.

-Acabas de decir que es tú amiga.-Dijo con superioridad, cerré mis puños con fuerza tratando de no golpearlo frente a todo la gente.

-¿Disculpa hay algún problema?. - Pregunto un anciano llegando con una pizza que supuse era la mía.

-Si, debería de contratar a empleados que vengan a trabajar, no a conseguir chicas.- Explique más calmada al señor que miro a todos los chicos que atendían.

-¿Quién?.-Preguntó, todos señalaron al idiota.- Te quiero en mi oficina, y usted señorita, le ofrezco mis disculpas, creó que esta es su órden.-Me entregó la pizza.

-Muchas gracias señor, ¿Podría prestarme un marcador?.

-Con gusto señorita.

Tomé el marcador y escribí por dentro de la caja.

"¿Quiéres ser mi novia?", Devolví el marcador y enseñé la caja al chico burlandome de él.

-Ojalá no acepte.-Soltó con enojo.

-¡William a mi oficina!.

Me burle y fuí a hasta la mesa.

-¿Todo bien?, noté un desorden ahí.- Susurro la castaña.

-Vamonos. -Tomé su mano saliendo del lugar.

-¿Qué sucedio?.-Siguio preguntado mientras caminabamos a mi casa.

-Ese chico quería tú número...

-Oh, que halago.-Me enoje y caminé mas rapido dejándola atrás.- ¡Camz!, no te enojes.

-"Que halago". -Repetí, estabamos casi llegando a mi casa así que caminé mas lento.

-Bebé, ¿Quién es mi bebé?.- Siguio tratado de que le hablará.

-Hola Jane.-Saludé a la guardia de turno con una sonrisa pícara tratando de que freen se enojara más.

-armstrog, ¿Te dejo entrar?.-Bromeó, noté su mirada en mi mano que sostenía la pizza, freen había tomado la otra.- ¿Ella es?.

-Es mi una amiga, amor.-Bromee dándole un guiñido, al ser de mi edad soliamos bromear mucho y ella sabía perfectamente de la existencia de la pelinegra en mi vida.

-Oh amor, un gusto conocer a tú amiga, pero entra que no quiero que me mate con esa mirada.- Ambas nos reímos y caminé dentro del jardín, los autos de todos estaban estacionados frente a la entrada junto a mi motocicleta, los del servicio seguro ya habrían salido pues solo venían por unas horas.

-Te odio.- Dijo cuando entramos, me quite la chaqueta tirándola por algún lugar y encendí la televisión de la sala.

-Sabes... Era una broma, pero tú comenzaste. -La tomé de la cintura trayendola conmigo hasta el sofá, le dí un largo beso.-Déjame ver que pongo.-Me separé de ella que se tiro en el gran sofá.

-Alcanzame una rebanada.- Señalo la caja en la mesa frente a ella.

-No, tomala tú.-Dije seriamente, seguí frente a la TV buscando una película.

-Oh dios mío. -Chilló, me di la vuelta mirando su rostro sonriéndome.

-freen...¿Quiéres ser mi novia?.

-¡Siii!.

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