• Donde Taehyung es un príncipe rebelde y Jungkook es su guardaespaldas que oculta un gran secreto.
- Au taekook (100% mío, no acepto copias).
- Omegaverse ; taetop y koottom.
- La hora, fecha y colores de cabello no importan a no ser que yo lo acla...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mingyu había llevado a su ex-compañero a lo que parecía ser la celda de una cárcel y lo encerró antes que Jungkook pudiera impedírselo.
—Listo, no creo que puedas escapar hasta que Wooshik me mande la señal.
—¿Por qué haces esto? Eras un buen amigo y todos en el equipo siempre te tratamos con respeto, no tenías motivos— dijo el omega mientras intentaba convencerlo de retractarse de sus acciones.
—De hecho no es nada en contra de ustedes, queríamos llegar a la familia Kim y el eslabón más débil era Taehyung, es por eso que tú estás aquí, él te quiere mucho... o al menos así se supone que era— se burló al ver el ceño fruncido que el menor le daba.
—Aún sigo sin saber cómo te enteraste de mi jerarquía.
El alfa lo miró con seriedad, debatiéndose internamente si lo mejor era decírselo, pero terminó cediendo.
—Sospeché desde la primera vez que te presentaron como nuestro líder, fue por eso que me acerqué a ti— confesó, sin importarle que Jungkook lo mirara con tristeza—. Todo aumentó cuando en los entrenamientos nunca me ganabas en fuerza, a pesar que de entre todos demostrabas tener mejor habilidad física y sería normal que hasta ganaras más músculos que yo.
—Eso podía ser por mi contextura física, no necesariamente por ser omega.
—Llegué a creer eso mismo. Sin embargo, cuando estabas de vacaciones, te encontré en una tienda de conveniencia junto a un amigo tuyo y pude percibir tu aroma a jazmín— dijo antes de acercarse más a los barrotes de la celda que lo separaban del menor—. Desde ese día lo supe, estaba seguro que no podía ser el aroma artificial de un perfume... no sabes cuanto me alegré, quería tenerte para mí, no es común ver a un omega como tú.
—Estás demente.
—Tal vez, pero yo estoy dispuesto a aceptarte, a diferencia de ese príncipe que no parecía muy contento por ver que le ocultaste algo tan importante estando en pleno cortejo. Ahora mismo seguro que mis hermanos están encargándose de él, harán que se comprometa a casarse con Eunha y una parte de su poder como heredero pasará para nosotros, es nuestro derecho.
—¡Pero prácticamente son familia! Eso es tan...
—¿Enfermo? Puede que si, no obstante, lo que nos interesa es el poder y estamos dispuestos a hacer lo que sea para conseguirlo— se alejó del lugar y se encaminó a la entrada de la habitación—. Piensa en lo que te dije, yo estoy dispuesto a enamorarte y es por eso que no te he hecho daño; ahora mismo sé que me odias, pero consideralo.
Luego de eso Mingyu se fue, no sin antes dejar a cargo a dos guardias para vigilar que el menor no escapara durante ese tiempo. Su idea funcionó bastante bien, al menos hasta que Jungkook fingió sentirse mal y provocó que uno de los hombres que estaban cerca a él entrara a la celda para asegurarse de su estado, siendo esta acción aprovechada por el pelinegro, quien lo derribó al igual que al otro hombre que intentó detenerlo.
