Capítulo 2

5K 824 38
                                    

Sus azules veían el techo perdidos nuevamente, había estado recordando a su ero sennin, su vida se reducía a la oscuridad en ese momento, ¿así quería morir?, aún recordaba las palabras de su  amado ero sennin “la verdadera medida de un Shinobi no es cómo vive, sino cómo muere”, sus grises se abrieron al hacer click en ese último pensamiento, levantó sus manos observando a través de la oscuridad su piel lastimada, llena de cicatrices por los intentos de escape que en algún momento realizó, mordió su mejilla, ¿así quería morir?, ¿así quería que sus padres y su ero-sennin lo vieran?, se sintió avergonzado de su condición actual, les prometió demasiado, no pudo cumplirlo, levantó su mirada gris recuperando un poco de motivación, ¿podría volver a intentarlo?, cerró sus ojos con cansancio, debía analizar bien o esta vez lo matarían, la vida de Kurama, su amigo, también estaba en riesgo.

….

Abrió de golpe sus ojos al escuchar el metal de la puerta azotarse, giró su mirada con debilidad para ver una mano atravesar un pequeño hueco en la esquina, metieron una bandeja con alimentos y un poco de agua. Naruto veía con cuidado cada movimiento del guardia, trataba de definir algo, pero estaba muy confundido por la deshidratación y el hambre, su grises definieron un cuerpo tras la pequeña ventanilla metálica donde metía sus alimentos, por un momento una idea retorcida llegó a su mente al ver las llaves colgar en el pecho del sujeto en un pequeño hilo, no era la primera vez que lo veía, la ventanilla se cerró de golpe, en poco tiempo abriría de nuevo la ventanilla el guardia para retirar su charola, lamió sus labios con ansiedad recordando a su ero-sennin y su determinación, no dudó, ¿qué más podía perder?, sintió un poco de su coraje y determinación volver, comenzó a comer con velocidad tratando de no vomitar, lo alimentaban poco, era normal sentir ganas de regresar la comida si tragaba con velocidad la comida, pero necesitaba un poco de fuerza para lo que tenía en mente.

Tomó el agua con desesperación, tenía mucha sed, tapó su nariz para controlar las ganas de regresar la comida, respiró hondo calmándose, estaba agitado, limpió con su antebrazo el agua que escurría por sus labios, sacudió su cabeza tratando de calmarse, tomó energía que no sabía que aún mantenía forzando su cuerpo como hacía tiempo no lo hacía, se levantó suavemente jalando la cadena de su pie, la sostuvo en sus manos con fuerza observando que era larga y pesada, había dejado de doler por el roce del metal en su tobillo hace bastante tiempo; escuchó un leve ruido en el exterior, lo que hizo que se pusiera alerta, se acercó a la ventanilla cuidadosamente evitando hacer ruido con el metal de la cadena o el arrastre de sus pies, se colocó a un lado de la pequeña ventanilla, esos guardias estaban confiados en el sello de supresión de chakra y la cárcel a su alrededor, tenía tiempo sin presentar rebeldía o intentar escapar, habían bajado su guardia.

Sus grises observaron la ventanilla abrirse con violencia como siempre sucedía, la mano del guardia entró a la celda tentando con sus dedos la tierra, buscaba la charola de comida, Naruto afiló su mirada haciéndola aún más gris, dejó caer la cadena sobre su mano, giró sus brazos con velocidad atrapando entre el metal grueso la mano del sujeto, antes de que gritara por ayuda jaló con todas sus fuerzas al sujeto, logrando que la quijada abierta para gritar por ayuda del guardia, golpeara con violencia la puerta de la celda metálica, su quijada se quebró al contacto causando un golpe sordo, un ruido similar al que generaba la ventanilla al abrir y cerrar, el sujeto cayó desmayado.

Naruto con cuidado sacó su pequeña mano por la ventana arrancando del cuello del sujeto las llaves, con velocidad buscó la de su pie, una, dos, tres llaves, comenzaba a desesperarse tratando de abrir el cerrojo del grillete, lamió sus labios al ver que el cerrojo había cedido ante la pesada llave metálica, estaba un poco en shock al darse cuenta que su pie estaba libre, sonrió ligero con algo de locura en su mirada, se acercó al cerrojo de la celda, probó nuevamente las llaves, no tenía tiempo, si tardaba corría el riesgo de ser atrapado, la puerta cedió a la segunda llave, sonrió con duda, abrió suavemente la pesada puerta evitando que el ruido del metal oxidado se escuchara con fuerza, cuando logró abrir un poco, arrastró al guardia al interior dándose cuenta que era bajo en estatura, no lo dudó, lo desnudó con velocidad, colocó su ropa roída sobre el hombre, mientras él se colocó la suya, colocó las llaves en su mano, las ocuparía más adelante, salió de la celda suavemente sintiéndose mareado al levantarse, tenía tiempo sin salir de esos cuatro metros cuadrados de celda, la última vez que intentó escapar había dos guardias en cada esquina, levantó una ceja con sorpresa al ver que no había más, al parecer habían concluído que no lo volvería a intentarlo después de la última golpiza, sus grises se movían con velocidad observando el pasillos alerta a todo a su alrededor, vivir en la oscuridad sin hablar con nadie había logrado desarrollar su oído e increíblemente su vista a pesar de la oscuridad y lo limitado del lugar.

Uzumaki Naruto (Itanaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora