|Prólogo|

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Me levanté de la cama y fuí directo al espejo del armario.

«Todo saldra bien» me convencí a mi mismo.

Miré mi reflejo en el espejo, mis ojos reflejaban nervios, miedo...

Al salir de la habitación apagué las luces y cerré la puerta de esta. Mientras bajaba las escaleras y miraba hacia abajo sabía perfectamente que mis nervios estaban a flote, nunca fuí perfecto en guardar bien mis emocines, cuando llegué a la planta baja fuí directo al comedor, tenia las manos sudadas y que me temblaban bastante, entré al comedor y vi a mis padres sentados cada uno en una esquina de la mesa, me derigí al medio y me senté, visualicé a mi padre con la cabeza baja comiendo y a mi madre igual.

|Ha partir de aquí os recomiendo escuchar watch, bellyache y hostage de Billie Eilish|

-Padres-Hice un asentimiento con la cabeza-necesito hablar con vosotros de una cosa con la cual no estoy de acuerdo.-Mencioné mientras frotaba las manos en mis muslos con fuerza.

-Di lo que tengas que decir y dejate de gilipolleces Walid.-Finalizó mi padre.

Comencé a frotar más rapido mis manos sobre los muslos mientras mi pierna empezó a moverse rápidamente, vi como mi padre alzó la cabeza y mi madre tambien.

«Eso no es bueno...» 

Agaché la cabeza mientras sentía la potente mirada de mi padre, siempre he querido sontenerla, pero nunca he podido.

-¿Con que mierda ahora no estas de acuerdo Walid?-Preguntó mi madre, se le notaba la voz  como si estuviera irritada.

-Ehh...-Me temblaba la voz, no podía-n-no qui-quiero cas-casarme-Dije mientras sentí como la voz se me desgastaba, tartamudeé en todo la frase. Después de eso vino un golpe que hizo que toda la mesa temblara, los vasos y su bebida de adentro se cayeron, los cubiertos algunos cayeron y otros se movieron de su sitio.

-¿Por que?-Mencionó mi padre con voz gruesa con el puño en la mesa después de aver pegado el golpe.-¿porque mierda no quieres casarte?-Lo miré con odio, un odio que deseo que algún día se desate y lo destruya todo.-¡DIME PORQUE MIERDA NO QUIERES!-Me tapé los oidos, sus gritos me irritaban, los odiaba, llevaba toda una vida escuchandolos y nunca me gustaron.

-¡Nada! solo que, que-Las manos se empezaron a mover solas de arriba a bajo, las piernas eran movidas rápidamente, tan fuerte que me dolían, y el pecho... el pecho me dolía como mierda, tenía una presón que no se quitaba, me costaba repirar y estaba empapado de sudor.

-¡QUE, QUE, QUE!-Volvío a gritarme.-¡DILO DE UNA MALDITA VEZ, MIERDA!-Gritaba mientras le pegaba puñetazos a la mesa y yo me tapaba los oidos, y mi madre, ella, ella se mantenía callada como si nada.

-¡QUE SOY GAY PAPÁ, ESE ES EL PORQUE!-le grité, le he gritado... LE ACABO DE GRITAR...

«Le he gritado...» 

«¿Que he hecho...?» 

¡Y BOOM! Y la mesa fué tirada por los aires, pude ver como mi padre se acercaba a mi con grandes zancadas, con ira en sus ojos y venas, lo sabía, se que me odiaba, pero yo más a el por ser un mal padre. Por sere así de mierda comigo. Se acercó y me agarró del cuello de la camiseta y me pegó un poñetazo, caí de pecho en el suelo, dandolé la espalda, luegó recibí una patada en la espalda, me quejé en un quejido y eso lo enfadó más.

-¡MARICON!-Me gritó, se que era una decepción para el, porque para el eso era una enfermedad, la cual se contagiaba, la cual tenía quie ser tratada a golpes, palazos, puñetazos, patadas, el lo veía bien, porque para el maltrato lo sulocionaba todo.-¿QUE HE ECHO MAL PARA QUE ME SALGAS MARIVON?-

Cuando el amor naceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora