—Eres un ser detestable, Jeon JungKook —dijo Taehyung sintiendo el dolor en su mejilla izquierda, producto del golpe que Jeon le dio.
El azabache rió fuertemente, soltando un jadeo cuando Taehyung lo golpeó justo en las costillas.
—Sin duda alguna eres la mejor creación que he hecho, Kim Taehyung —murmuró—. Tú y yo estaremos juntos por siempre, cariño. Tú eres parte de mí y yo soy parte de ti, no lo niegues, me necesitas tanto como yo te necesito a ti. Aunque quieras denunciarme, no serás tomado en cuenta y lo sabes demasiado bien.
—N-No sabes cuánto te odio, Jeon. Por tu maldita culpa todos me tachan de un maldito loco —con rencor, el castaño dijo. Se sentía débil, cansado de estar lidiando con la situación—. Eres un loco, un maldito desquiciado.
JungKook se abalanzó sobre Taehyung, haciendo que el menor cayera al piso, jadeando del dolor. El mayor reía divertido, todo un maldito psicópata. JungKook se subió sobre Taehyung y comenzó a golpearlo, el castaño se cubría como podía.
El menor cometió el error de querer ir a denunciarlo, cosa que no funcionó.
Se preguntan, ¿Qué es lo que pasa? Bueno, la respuesta es que aquel hombre llamado Jeon JungKook era un maldito asesino serial, demasiado astuto. Nunca en sus tres años de asesino encontraron alguna pista. Pero aquel chico llamado Taehyung llamó considerablemente su atención, poniendo su mundo de cabeza, terminando obsesionado, que dejó de lado lo que más le gustaba, solo para atormentar al chico.
Poniendo a los inquilinos de aquel edificio a vigilar al castaño las 24 horas. El castaño no era tonto, sentía su presencia a tan solo unos metros de distancia, era su sombra. Dónde quiera que el menor fuera, él estaría ahí.
—Siempre te acompañaré, así sea en tus peores pesadillas, pequeño desastre.
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STRANGERS FROM HELL
Mystery / ThrillerTaehyung, un chico que acababa de mudarse a Seúl, Corea del Sur, se ve en la necesidad de buscar un departamento a bajo costo, ya que el sueldo que gana no es lo suficientemente bueno como para tener un departamento de lujo. ¿Qué pasaría si, mientra...