Capítulo 2: La amistad de los Jades de Lan

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Al día siguiente se despertó muy temprano para poder servir el desayuno a sus amos y después de eso estuvo ayudando a los dos jades de Lan en su entrenamiento, les llevaba agua fresca para que pudieran hidratarse y toallas para secarse el sudor.

Después de la prática Lan Wangji fue a darse un baño para refrescarse y le pidió a Wei Ying que volviera en una hora con una toalla para secarse. Cerca de la hora el joven sirviente regresó hacia los baños termales de la residencia y se percató de que una sirvienta más joven que él estaba espiando al segundo jade de Lan mientras se bañaba, esto hizo hervir la sangre de Wei Ying.

-Disculpa ¿pero que crees que estás haciendo?- al escuchar aquella voz la chica no pudo evitar gritar asustada y salió corriendo tan rápido como pudo bastante apenada. Tras escuchar el grito, la puerta de los baños se abrió y Wei Ying se encontró con un molesto Lan Wangji.

-Wei Ying...-

-Se lo que está pensando... por increíble que esto parezca yo no estaba espiando mientras usted se bañaba... era una de la sirvientas la que estaba haciendo eso y...- el menor tragó saliva cuando vio que Hanguang Jun desenvainaba su espada y después se detuvo pensativo al recordar que había una sirvienta que se notaba que estaba muy enamorada del segundo jade de Lan.

-Retírate- dijo mientras arrebataba la toalla de las manos de Wei Ying, por la rapidez con la que salió del baño solamente pudo colocarse su túnica aún estando todo su cuerpo mojado.

-¿Estoy en problemas?-

-Dije que te retires... y tráeme una muda de ropa... déjala aquí en la puerta y te vas- ordenó el mayor mientras volvía a entrar en los baños y cerraba la puerta.

Horas más tarde Wei Ying supo que a la sirvienta la regañaron por andar haciendo esas cosas y terminó despedida, gracias a que él la descubrió. Ahora nadie se interpondría entre él y los dos jades de Lan y haría lo que sea por ganarse la confianza de ambos, con Xichen estaba funcionando pero Lan Wangji si que era difícil.

-¡Hola!- saludó Xichen cuando se toparon en uno de los pasillos -¿Que tendremos hoy para almorzar?-

-Pues ¿Hay algo en especial que le gustaría, amo?- preguntó Wei Ying sonriendo radiante como solamente él podía hacerlo.

-Sorpréndeme con una de tus recetas y por cierto... puedes tratarme de tú- Xichen era un hombre bastante relajado y detestaba los formalismos, así que le permitió a Wei Ying que lo "tuteara" siempre y cuando no hubiese nadie alrededor. Eso era buena señal, se estaba ganando la confianza del primer jade de Lan y ahora solamente faltaba la del segundo.

-Muy bien... haré algo que te encantará- dijo Wei Ying sonriendo de lado.

-Por cierto... ¿Nos vemos esta noche para beber té?- preguntó el mayor antes de irse.

-Me gustaría pero Hanguang Jun me encomendó una gran tarea- dijo haciendo un leve pucherito, siendo que como "castigo" por haberlo sorprendido en el baño lo puso a limpiar todos los baños termales durante la noche.

-Ohhh si... el incidente del baño... descuida yo se que no fue culpa tuya... esa mucama llevaba ya meses acosando a mi hermano.

Después de eso ambos jóvenes se despidieron, Lan Xichen fue a realizar sus actividades pendientes y Wei Ying a la cocina a preparar el almuerzo, después de comer Lan Wangji fue al jardín a ver a sus conejos y por alguna razón pidió Wei Ying que le acompañara llevando una cesta con verduras para los conejos. Una vez ahí el joven sirviente se sorprendió de lo hermoso que era aquel lugar, pero sobre todo por la cantidad de conejos que habitaban ahí. Había de todos tamaños y colores, blancos, cafés, grises, negros y otros con manchitas.

-Respecto a lo que sucedió en los baños yo...

-Está bien...no fue culpa tuya... y no volvamos a mencionarlo.

Interrumpió el mayor siendo que ya había hablado con su hermano y ya no estaba enfadado con Wei Ying.

-Entonces... sobre lo de mi castigo... ¿Crees que se pueda anular... Lan zhan?

-¿Como me llamaste?- preguntó el mayor mirándolo fijamente y encarnando una ceja.

-Lo siento... creo que ese apodo suena mejor en mi cabeza.

Dijo sonriendo apenado el menor.

-Por supuesto que aún vas a lavar los baños esta noche, eso te enseñara a cuidar tus modales.

Contestó Hanguang Jun, quién ya había dejado el incidente de los baños en el pasado pero aún deseaba "castigar" a Wei Ying por su insolencia de llamarlo de esa forma.

-Ahora ven acá y ayúdame a alimentar a los conejos.

Ordenó el mayor.

Ambos se sentaron sobre el césped a la sombra de un gran árbol para después los conejos acercarse impacientes por comer y Wei Ying le entregó una zanahoria a Lan Wangji para comenzar a alimentarlos.

-Son muy hermosos ¿tienen nombre?

Preguntó el menor mientras alimentaba a otro de los conejos con otra zanahoria.

-Son demasiados, no podría nombrarlos a todos.

Contestó el mayor concentrado en su labor de alimentar a los conejos.

-Bueno, este se puede llamar "Lan zhan"- dijo riendo el menor mientras Lan Wangji le miraba con el entrecejo fruncido -Vamos, solamente bromeo, debes animarte de vez en cuando.

El segundo jade de Lan pensó que quizás su sirviente tenía algo de razón pero por más que lo intentara no estaba en su naturaleza ser simpático y relajado como su hermano mayor. La tarde pasó rápida mientras ambos chicos estuvieron en el jardín de los conejos y en cuanto oscureció volvieron a la residencia. Después Wei Ying ayudó a preparar la cena y al final del día fue a lavar los baños.

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