love me again || yoontae

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La luna de miel había sido todo un sueño, Yoongi planeo un viaje a Nueva York, con el fin de que cada noche cenaran un restaurante diferente con un show de jazz diferente algo que a Taehyung le facino, estaba completamente conmovido al ver a Yoongi tener un itinerario de los shows y quienes tocarían esa noche

Sabía que el mayor no era muy conocedor del jazz pero había investigado y esforzado por lo cual, para Taehyung ese era el mejor regalo de bodas que el mayor le había dado.

Claro que el castaño sabía recompensarlo muy bien al regresar al hotel después de haber bailado mucho

Tres semanas fuera de país les había ayudado a ambos a crear su propia burbuja y olvidarse un poco de todo el estrés al rededor de la boda.

Sin embargo, ahora tenían que volver a la realidad, algo que no sería fácil, al menos para Taehyung.

—¿Recibieron mi regalo de bodas? Fue una pena que no me invitarán, me hubiera gustado darselos en persona— habló Seokjin viendo a la pareja sentada frente a él en su oficina

—¿Tienes los papeles?— Yoongi fue al grano, quería salir de ahí lo más pronto posible

Después de volver de la luna de miel, Seokjin había llamado ansioso de finalizar el trato, de traspasar la empresa en decadencia de su padre a manos de su cuñado.

Seokjin río suave ante la actitud arisca de Yoongi.

—Ahora somos familia Yoon, administraras una de las empresas Kim, creo que deberías al menos ser un poco de cortés con tu cuñado— le sugirió con una sonrisa de suficiencia.

—Terminemos con esto de una vez Seokjin— le miró esta vez Taehyung

Había sido la primera vez que el castaño hablaba desde que habían llegado, y es que Yoongi le dijo que no cayera en provocaciones que solo lo lastimarian, pero al verse demasiado irritado por la actitud de Seokjin no se pudo controlar.

—Bien— alzó una ceja el mayor para luego deslizar unos documentos sobre la mesa —Debes firmar para que la empresa de Taehyung pueda ser administrada por su cónyuge, osea tú, Min— le sonrió

Yoongi solo le acercó los documentos hacia él para firmarlos, se había encargado de que sus abogados los leyeran y ayudarán modificando algunas cláusulas, sabía lo que estaba firmando y Seokjin sabía los problemas legales que enfrentaría sí hubiese cambiado algo.

Taehyung sentía un nudo en su garganta al escuchar el bolígrafo trazar las hojas con la firma de Yoongi, no había vuelta atrás, había caído en los chantajes de Seokjin, era una culpa que cargaría toda su vida

Sabía que Jimin tenía razón, que debía dejar que Yoongi lo ayudará, que lo protegiera, y no sentirse mal por ello, pero de lo que sí se siente mal, es de haber caído en la trampa de Seokjin

El solo saber que él había planeado esto desde el día que le pidió ayuda para que los rumores desaparecerían, se siente como un idiota por todas las falsas ilusiones que se creó en su mente.

—Listo— terminó Yoongi dejando los papeles de nuevo a merced de Seokjin —La próxima semana empezaré con mis labores, espero no verte por ahí, o tendré que llamar a seguridad, ahora que esa empresa estara bajo mi mando lo último que quiero es que tu tengas que ver con ella—sentenció Yoongi

—Hay empresas que están destinadas a morir y esa es una, pero al menos su fracaso no recaerá en mis hombros sino en los de mi cuñado, cortesía de mi hermanito, espero en verdad puedas recuperarla, eso pondría de muy buen humor a mi padre, pero sino puedes hacerlo, comprenderé que todo lo bueno que dicen que eres en los negocios no es nada más que publicidad engañosa— le giño un ojo cruzando sus brazos sobre su pecho.