SINOPSIS
Serenity Tsukino ha estado desempleada desde que se graduó de la universidad, hace lo posible para que la contraten y así ejercer lo que le costó años por hacer, pero no encuentra algún puesto vacante. Así que para ganarse la vida decide es...
»» Haz cometido un error, ¡Haz cometido un error! ««
El razonamiento en mi cabeza me estaba gritando. Debía parar todo esto pero ¿Cómo? Yo había sido quien había iniciado con todo, di me aprobación, mis cláusulas y…
Que más da. Ya hemos obtenido el orgasmo que deseábamos ¿Qué más podemos hacer? Solo hay que disfrutar de lo bueno
»» Pero en un par de horas te vas arrepentir ««
O quizás no. Uno nunca sabe.
Diamante estaba ahí, de rodillas mirándome con tanta lujuria que me daba miedo y a la vez un completo placer. Sus dedos recorrieron con lentitud mis muslos. Cada maldito roce me hacia jadear, el corazón latía con fuerza y mi mente estaba completamente en blanco.
—Ya me has demostrado que eres muy buena en dar mamadas, esa boquita tuya es muy buena
—Gracias —Sonreí con orgullo.
Todo mi conocimiento se lo debo agradecer a mis libros con escenas explícitas, libros que seguramente al morir me iré al infierno por no ser tan Santa e inocente, además los videos porno ayudaban demasiado aún que nada se compara con la realidad.
—Ahora, ¿Cuándo fue la última vez que recibiste sexo oral? ¿Cuándo fue cuando alguien, —sus dedos separaron mis labios vaginales tocando con suavidad la perla hinchada que necesitaba ser tocada— saboreo esto?
Jadeé deseando que sus dedos se movieran justo en donde más lo necesitaba, pero al parecer Diamante le gusta verme sufrir. Traté de moverme más para que sus dedos tengan ese contacto que tanto necesitaba pero el muy idiota sonrió de lado retirando su mano.
—Responde linda
—¿Qué más da? —Bufé malhumorada y a la vez necesitada—. Se supone que aquí tu eres el maestro ¿no es así? Mi vida sexual es… Diferente
—Muy escasa ya que revelaste que solo tuviste una vez
—Yo no dije eso —protesté avergonzada
—Lo dejaste a entender ¿Qué tan malas han sido tus expectativas en el sexo? ¿Quién ha sido el idiota que te arrebató tus ilusiones?
—Un hombre idiota que creyó que dándose placer iba a ser igualitario pero lo único que hizo fue mandar al carajo mis preciosas expectativas —me dejé caer sobre la suavidad de las sábanas—. ¿Es cierto que el sexo es una de las maravillas más espectaculares?
No hubo respuesta por parte de Diamante. Fruncí el ceño intentando incorporarme para mirarle pero aquel movimiento me hizo volver a dejarme caer soltando un gemido y jadeo al unísono.
