One shots KEJ/KJOO &Team. K x Euijoo. Keuijoo

#1: Mí chico estrella

Pov Koga.

Mientras escribo esta carta, te miro y veo una estrella, pero no la que todos admiran, sino mí Euijoo centelleante por su eterna ingenuidad, por esa sonrisa angelical que ilumina trillones de universos, por tu adorable torpeza, esa que me roba genuinas sonrisas y mi alma obsesiona.

¿Sabías que cuando me observas con duda para consultar si está bien lo que dices, mí corazón retumba de forma irregular? Ese tipo de mirada en ti, me desborda, porque sé depositas tu confianza en mí. Gracias por confiar en mí.

Seguro estoy de que eres conocedor de mí profunda admiración por ti, ya que lo demuestro con constancia. Te contemplo con fascinación, porque sencillamente, me es una tarea imposible el no hacerlo.

Soy tu admirador número uno, mí chico estrella.

No sé si algún día leerás esta carta, si seré capaz de revelártela, sin embargo, quiero sepas qué es lo que provocas en mí, el cómo me haces perder la cordura, en el buen sentido.

Sobre todo, anhelo manifestarte mí sentir, decirte cuánto...

—Koga, ¿qué estás escribiendo? —preguntas curioso deslizándote desde tu lugar en el sofá, hacia mí.

—Na-nada. —Balbuceo, sorprendido. Guardo la carta en el bolsillo del pantalón.

—¿Uh? ¿Por qué lo escondes? —indagas, reflejando travesura en el semblante. Oh no—. Muéstrame.

—Euijoo, no es nada. —Intento mostrar firmeza, pero me veo aturdido y alterado cuando haces el ademán de revisar mi bolsillo—. Oye.

—Mués-trame. —Exiges, en una suave tonada japonesa, continuando con tu intento de robo.

—No, Euijoo. —Trato de reprenderte para detenerte. Retrocedo en mí sitio, al mismo tiempo.

—Ven~.

Oh, estás siendo demasiado travieso. Es algo que me encanta de ti, porque lo eres más conmigo en la privacidad, pero ahora...

—No... No Euijoo. —Te observo con horror al verte con la carta en manos. ¿Cuándo llegó a ellas?

—A ver —sonríes, juguetón. Abres el papel y... Lees.

Me tenso en demasía, estupefacto al ser testigo de cómo tus ojos se mueven en modo lectura.

¿Por qué ellos titilan en brillo?

No puedo descifrar tus emociones en este momento, más te cubres la boca.

¿Te asombra, disgusta o agrada? Dime, no resisto esta incertidumbre.

—¿Lo escribiste... Para mí? —averiguas.

¿Qué decirte? No tengo resuelta tu interpretación, si te ha gustado o no.

—Koga, necesito saberlo. —Insistes.

—Yo... Sí. Es para ti, pero...

—¿Pero...? —descubro titubeo en tu mirar. Viras entre el mío. No quiero dudes de mí sentir, por favor.

—No creí lo leerías, ahora. —Me cubro el rostro, inclinándome hacia delante—. Es tan vergonzoso. —Suspiro en una queja.

—Yo... No creo lo sea. Sentí honestidad y... Mucho cariño.

Apenas eso dices, descubro mis ojos para mirarte, notando entonces cómo desciendes la mirada, comenzando a ruborizarte.

Ubicas las manos sobre tus muslos, recto, y algo tensionado.

No, Euijoo, eres irresistible para mí cuando así te comportas.

—No quería confesarme de este modo. —Sincero.