• El sabor de lo prohibido.

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- Cuando te conviertes en un trofeo de guerra... NADA puede salir bien.


Mi nombre es Clara Rigantti. Hace años soy novia del piloto de fórmula 1 Esteban Ocon. Todo el mundo conoce la fama de Esteban, sale de noche, se emborracha y está con mil mujeres... ¿porque sigo con el? Por La Paz de mi familia.
Mi padre, un apostador empedernido perdió todo su dinero, el cual ganó el padre de Esteban, pero como su deuda no pudo ser saldada, yo, fui el pago.

Era común verme por el paddock, callada, con la mirada perdida o parada sonriendo sin ganas al lado de el para las fotos.
Era una carrera más en la que yo estaba ahí, solo para acompañarlo y sonreír falsamente hasta que..

- Puedes irte, no quiero verte aquí ahora.- Dijo Esteban enojado porque su auto había salido de la pista y ahora estaba fuera de competencia en la primer práctica libre.

Salí a caminar, fui un lugar alejado, sin darme cuenta me detuve detrás de los garajes de McLaren.

- Hola...- dijo una voz suave a mi lado.

- Hola.- respondi sin mirar quien era el que hablaba.

- Tu eres la novia de Esteban ¿verdad? No recuerdo tu nombre.-

- Soy Clara, Clara Rigantti.- Dije alzando mis ojos a ver quién  era el que preguntaba.

- Un placer conocerte Clara.. soy Lando.- dijo dedicándome una tierna sonrisa.

No me pregunten porque, pero algo en mi interior, comenzó a revivir...

- Te vi muchas veces, pero nunca me atreví a hablarte- Dijo Lando mientras se sentaba a mi lado.

- Mejor que sea así..  Esteban se vuelve insoportable si alguien lo hace.-

- ¿Tanto se enoja?.-

- Tiene un carácter especial. Después de años aprendí a bloquear de mi mente sus berrinches.-

Mi celular comenzó a sonar, era Esteban...

- Si...- respondí sin ganas.
* ¿Se puede saber donde demonios estás Clara?*
- Ya voy..-

- Bueno Lando... un placer hablar contigo.- Me pare y extendi la mano para saludarlo.

- Un placer conocerte Clara.- dijo levantándose y dándome un beso en la mejilla.

Camine sintiéndome extraña, había visto a Lando pasar mil veces, pero realmente nunca le había prestado atención. Su sonrisa era cautivadora y sus ojos podían hacerte poner de rodillas.

- Por fin apareces.- dijo Esteban enojado.

- Aquí estoy...¿que quieres?-

- Cuidado como me hablas adelante de la gente, debes comportarte.- dijo por lo bajo, enojado.

Nos sacaron un par de fotos, todos nos felicitaban por nuestra linda relación... si realmente supieran que eso era el verdadero infierno.

Llego el sábado. Hoy la competencia era más interesante,  yo no era de una Scuderia en particular, pero me gustaba ver correr a Sainz y Lando, ese dúo tenía algo cautivador.

Estaba en el garage con Esteban cuando veo a Lando pasar por delante nuestro, saludo con la mano... Esteban le respondió el saludo e inconscientemente yo también...

- ¿Que haces?-

- Solo saludaba Esteban, no te alteres.-

- ¿Que quieres? ¿Andar de zorra por todo el lugar?-

- Eres un idiota.- dije tomando mis cosas para irme.

Me sujetó del brazo fuerte y por lo bajo me dijo: - Vete, pero al hotel.-

Nos hospedamos en un hotel a 5 minutos del circuito.  Tiempo suficiente para tenerme controlada.
Antes de irme, pasé por el garaje de McLaren, Lando me vio y le dije lo más discretamente posible  que le escribiría por Instagram.

El sabor de lo prohibido. (Lando Norris +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora