La piba trastornada que llegó a Death Note

Lloré

Culpa de L

Él ya lo había conocido, se me presentó en la uni, tuvimos una extremadamente extensa conversación y aprovechándome de su falta de afecto femenino le saqué la información de que él es L todo mientras comíamos.

- En serio? Qué sorpresa señorito... - estaba arrasando con las habilidades persuasivas que aprendí de Ligth, y como él no sospecha de mí... Verdad? - Me sorprende lo mucho que puedes llegar a mentir para tratar de impresionarme.

- Cómo puedes dudar de mí y estar tan segura de que estoy mintiendo?

- Te lo pinto de ésta manera, nadie sabe la identidad de L, incluso hay personas que teorizan que L es una organización en conjunto, en parte tienes razón pero dudo mucho que el L verdadero esté sentado frente a mí comiendo pastel - Estaba haciendo como que dudaba de él para disimular un poco la cosa.

- Tienes razón pero si L fuera una sola persona claramente querría vivir incógnito, por lo tanto L podrías ser tú, así como podría ser yo - Se los resumo en ésto.

Tuvimos una conversación acerca de quién podría ser L, al final hice como que le creí, le conté a Ligth, y Ligth me propuso lo siguiente.

- Deberías aprovechar y engatusarlo, o algo parecido, así te tendrías fuera del radar de sospecha de L, más adelante yo veré cómo resuelvo.

- Vas a estar bien? - Ligth agarra y me da un beso en el párpado (siempre que hace eso es como decirme “haré mi mejor esfuerzo”) - ¿Qué hay de nuestra relación?

- De momento tendremos que separarnos, pero diremos que quedamos en buenos términos - Mi corazón se encogió un poco pero al final terminé aceptando.

Sabía el plan, sabía qué tenía que hacer para estar a salvo, pero aún la mente me daba vueltas, estaba completamente confundida, cómo haría para no volver a enamorarme de L, digo, sé que tengo que hacer que se interese en mí pero una vez que lo haga yo sé que él va a ser extremadamente atento conmigo, ya estuvimos en una relación antes, y eso me hizo pensar ¡¿Qué haré cuando vea a Mello?! A él también lo amé, odio las dudas existenciales, estaba llorando de la frustración.

- ¿Por qué lloras? - Verga L se me había acercado y me había visto llorar.

- No es nada...

- Nadie llora por nada.

- Pues yo sí lo hago, ahora no me gusta que me vean llorar...

- Entonces por qué estás sentada acá? - estaba en una banca de la parte de afuera, yo no respondí, desvié la mirada y me sorprendí cuando él me abrazó - Sé que algo te pasó, está bien si no me quieres contar...

- ... - Solté más lágrimas y también lo abracé, sentir su calor corporal después de tanto tiempo, y su olor, la manera en la que me hablaba, sé que no puedo estar con él pero al menos disfrutaría este pequeño momento junto a él...