Conexiones Silenciadas

《 1》•Primer encuentro •

★Una tarde nublada en la ciudad★

Un callejón en la ciudad, oscurecido por la nubosidad. El sonido del tráfico distante y la gente murmurando se escuchan de fondo. Se ve a un grupo de criminales intentando asaltar una tienda.

Criminal 1:(con una voz rasposa) ¡Rápido, llévatelo todo antes de que llegue la policía!

Criminal 2: (nervioso) ¿Qué pasa si nos atrapan? No podemos dejar pistas.

Akane: (entrando al callejón, tratando de intervenir) ¡Déjenlos en paz! ¡Esto es un robo!

Criminal 1: (dándose la vuelta, burlón) ¿Y tú quién eres para detenernos?

Akane: (demostrando habilidad en combate) Soy alguien que no permitirá que esto siga.

Los criminales se abalanzan sobre Akane, pero ella demuestra gran habilidad al desarmar y derribar a varios de ellos. Sin embargo, la situación la supera debido a la cantidad de atacantes.

De repente, Tamaki Amajiki aparece en la escena, moviéndose con una precisión y agilidad impresionantes. Utiliza sus poderes de transformación para neutralizar a los criminales con rapidez.

Tamaki: (luchando contra los criminales) ¡No te preocupes, me encargaré de esto!

En un breve y violento enfrentamiento, Tamaki se asegura de que todos los criminales queden incapacitados. Akane observa con asombro.

Akane: (respirando pesadamente) ¡Vaya! Eres increíble.

Tamaki: (mirando a Akane con una expresión preocupada) ¿Estás herida?

Akane: (sorprendida por su preocupación) No, estoy bien. Solo... agradecida. No sé qué habría hecho sin tu ayuda.

Tamaki: (sonriendo tímidamente) Solo estaba en el lugar correcto en el momento adecuado.

Ambos se miran un momento, la tensión de la batalla aún palpable en el aire. La sirena de la policía suena en la distancia, acercándose.

Akane: (nerviosa) Creo que la policía está en camino. ¿Qué hacemos ahora?

Tamaki: (mirando hacia la entrada del callejón) Deberíamos irnos antes de que lleguen. ¿Te parece bien?

Akane: (asintiendo) Sí, claro. Vamos.

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•Un café cercano•

•Un pequeño café con mesas de madera y una atmósfera cálida. Tamaki y Akane se sientan en una mesa junto a una ventana. La luz de la tarde entra suavemente a través del cristal.•

Tamaki: (sirviendo un té) Aquí tienes. ¿Estás segura de que estás bien?

Akane: (sonriendo agradecida) Sí, solo un poco agitada. Gracias por el té.

Tamaki: (sentándose frente a ella) No hay de qué. Me alegra que estés bien. Fue un poco caótico allí fuera.

Akane: (mirando curiosamente a Tamaki) No puedo dejar de pensar en tu habilidad. Eres... diferente de otros héroes que he visto.

Tamaki:(mirando hacia abajo, incómodo) No soy muy bueno hablando con la gente. Solo trato de hacer mi trabajo.

Akane: (inclinándose hacia adelante) Parece que lo haces muy bien. ¿Te importa si te pregunto algo?

Tamaki: (sorprendido) Claro, adelante.

Akane: ¿Cómo lidias con... todo esto? La tensión, el peligro, la gente...

Tamaki: (pensando) Bueno, no siempre es fácil. Hay momentos en que me siento... abrumado. Pero creo que hacer lo correcto es lo que me mantiene en marcha.

Akane:(asintiendo) Entiendo. A veces me siento así también, aunque de una manera diferente.

Tamaki: (interesado) ¿A qué te refieres?

Akane: (dudando, pero luego decidiendo abrirse) Mi pasado no ha sido fácil. Perdí a mi familia hace años y desde entonces he tenido que aprender a ser fuerte por mi cuenta.

Tamaki: (mirando con compasión) Lo siento mucho. No sabía. Es difícil enfrentar esas cosas solo.

Akane:(mirando por la ventana) Sí, a veces siento que no tengo a nadie en quien confiar.

Tamaki: (con sinceridad) Si necesitas hablar o simplemente alguien que te escuche, estoy aquí. Puede que no sea el mejor en esto, pero me importas.

Akane:(sonriendo con gratitud) Gracias, Tamaki. Eso significa mucho para mí.

El camarero se acerca con dos platos de pastel. Tamaki y Akane se sirven mientras continúan charlando en un tono más ligero.

Tamaki: (sonriendo) ¿Te gusta el pastel?

Akane:(riendo) ¡Sí! Me encanta. Es una de las pequeñas cosas que me alegran el día.

Tamaki: (riendo también) Entonces, creo que eligió el momento adecuado para un dulce.

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•Una calle tranquila, al caer la noche•

Una calle iluminada por farolas. Tamaki y Akane caminan lentamente hacia sus respectivos hogares.

Akane:(mirando hacia el cielo estrellado) Ha sido un día extraño, pero bueno. Gracias de nuevo por todo, Tamaki.

Tamaki: (sonriendo) No tienes que agradecérmelo. Fue un placer conocerte.

Akane: (mirando a Tamaki) Siento que... hay algo especial entre nosotros. No sé qué es exactamente, pero lo siento.

Tamaki: (mirando a Akane, sintiendo la conexión) Yo también siento lo mismo. Aunque sea difícil de explicar, hay algo aquí que me hace sentir... en paz.

Akane:(con una expresión pensativa) Tal vez esto es solo el comienzo de algo más.

Tamaki: (asintiendo) Tal vez.
Vamos a ver qué nos depara el futuro.

Ambos se despiden con una sonrisa y se dirigen a sus casas, el silencio de la noche envolviendo la escena.

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