Un ángel perfecto

La universidad es peligrosa

Un nuevo día se presentaba, las personas caminaban de aquí para allá, inmersas en sus propias actividades de la vida cotidiana.

La vida es bella, un clima fresco, aves cantando, una refacción hecha por mamá, sus leyes ordenadas y la tarea realizada, para Lee Won esto sería perfecto, de no ser por aquel hombre raro con alas arriba de su cabeza.

-¿Por qué debes estar sobre mi cabeza?

-Cualquiera que escuchara tus palabras sin contexto pensaría otras cosas.

Lee Won se dirigía a su Universidad a pasos armoniosos, las personas lo veían y lo saludaban sin saber que un ángel se encontraba sobre la cabeza del estudiante.

Lee Won admitía que no pesaba, en realidad solo sentía una frescura extra sobre su cabeza y escuchaba todo lo que Caesar dijera, las demás personas no podían ver al ruidoso ángel.

-¿Por qué estudias leyes? Los humanos son seres que más rebeldes son, no siguen sus propias normas.- Caesar iba de los más gustoso sobre la cabeza de su humano, le gustaba la vista y sentir que su humano estaba vivo.

-Derecho no es solo normas y sanciones, también es protección, armonía y orden.- Para responder sus preguntas al ángel loco, Lee Won sacó su celular y simuló hablar por llamada.

>>Además que existe la posibilidad de ayudar y defender a los más débiles y vulnerables.

Caesar sonrió, al Dios Xie Lian le gustará tener en el reino de los cielos a este ser.

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El ángel no se separaba de Lee Won, y eso era un estrés añadido en clases.

-A través de los años, el Derecho Internacional ha evolucionado, para evitar los conflictos entre países y no repetir los errores del pasado.- El catedrático explicaba su clase, pero Lee Won estaba cansado de escuchar "dos catedráticos".

-Si claro, Israel hace de las suyas y nadie dice nada, Rusia hace guerra y ahí todos odian a los rusos, la diferencia es que uno es comunista y el otro no, que hipócritas son.

Si, en cada clase, Caesar daba su opinión de la forma más filosa posible.

-¿Si eres un ángel? ¿Dios tiene ángeles así?

-No has visto a Yevgeni e Ilay, ellos son los verdaderos "¿Dios tiene ángeles así?".

Lee Won solo podía rezar por esos humanos quienes tenía ángeles peores que Caesar.

-¿Por qué no vas y das una vuelta por ahí? Tal vez encuentras a Ilay.

-¿Qué me vaya a buscar a ese loco? No gracias, mejor te ayudo a pensar en clases.

-¡LARGO!

Todo el salón de clases giró su mirada al estudiante que había hablado un poco fuerte.

-Joven Jung, ¿por qué no viene y explica la importancia del Derecho Internacional?

-Si Licenciado.

Al final, Caesar decidió salir del salón de clases y dicho y hecho, se encontró con un loco, solo que era el peor.

-Vaya, vaya, ¿No que tu tigre?

-Ni hables Zhenya, que te veo igual de solo que siempre.

Por otro lado, Lee Won se dirigía hacia los baños para despejarse.

Y vaya mala racha.

-Oye, Becado, ¿vienes a jugar?

Un golpe había llegado desde atrás y lo dejó mareado.

-Los chinos son odiosos, por ellos hubo pandemia.

-¿Por qué no te vas a tu país?

Lee Won había viajado desde Corea a América para estudiar leyes del método Latín y luego ir a EEUU a estudiar el método Anglosajón. Pero nunca esperó que existiera tal rechazo en la comunidad estudiantil.

Lee Won sabía artes marciales, pero un 7 vs 1 nunca será algo justo.

O eso sería hasta que llegó un ser a defender a su humano.

Pero para los extraños, es un lobo gris que gruñendo se acercaba a los 7 malandros.

-Eso es... ¿un lobo?

-¿Qué hace un perro así?

Poco a poco los 7 malandros se alejaron del inconsciente Lee Won, pensando en escapar, pero se encontraron con alguien en la entrada.

-Otra vez ustedes hijos de puta.

-Taek Joo.

Sin esperar algo, el moreno recién llegado comenzó una pelea a puño limpio con los malandros, y estos terminaron huyendo.

Claro que, faltaba alguien más para sorprenderlos, querían escapar los matones pero justo de la fuente en medio de la Universidad, un enorme cocodrilo de cuerpo extrañamente dorado salía.

-¿Qué puta mierda? ¿Esto es un zoológico?

-Con tanto idiota estudiando aquí si.- Respondió el cocodrilo, tres proceden a desmayarse, uno se orinó mientras caía y retrocedía a como pudiera, dos más corrieron rumbo a la salida del instituto, el último intentó darle pelea al reptil que se acercaba poco a poco.

Para sorpresa del estudiante, el cocodrilo se transformó en un hombre rubio de ojos azules, su cola de reptil se movía tras él y unas orejas de zorro doradas se alzaban con orgullo.

-Adivina, ¿Qué tiene Yevgeni en la bolsa?

-¿Q-qué tienes?

-...-

-...-

-¡UNA GRANADA!

-¡AAAAAAHHHHHH!