◤✞ ¢σяαzση ∂є нιєℓσ ✞◥

◤✞ ρяσℓσgσ ✞◥

no puedo estar tranquilo,desde que llegue a este lugar mi mente es perturbada por aquellos recuerdos de esa noche.

  era un dia  normal como todos, yacia en la montaña, donde estaba mi cabaña, alli vivia con mis padres y mis dos hermanos, mi padre era leñador y mi madre cuidaba amis hermanos, yo siempre me quedaba a ayudar ami madre, amaba pasar tiempo con ellos.

desde lejos escuchaba como el menor, theo, venia corriendo hacia mi, gritando como si hubiera visto un fantasma, me habia parado de mi asiento y haciendole una seña para que guardara silencio debido a que el bebe dormia.

"¿que sucede?, porque ese escandalo."

"¡un demonio!"

"¿que tonterias dices?, ellos no existen,son cuentos de terror."

si tan solo le hubiera creido.

"¡pero es verdad!"

observe como theo se alejaba hacia su cuarto haciendo un pequeño mufido, era normal de un niño de 6 años.

todos dormian, me habia levantado a buscar un poco de agua aun seguia un poco atonteado debido al sueño, pero no era tan tonto como para saber que no habia alguien alli, observandome, supuse que era noe, mi hermano mayor.

"oe, nee-san, deja de joder y vete a dormir."

no habia oido ninguna respuesta, eso me habia echo enfurecer de apoco, volvi a repetirlo pero nada, pensaba que capaz era una de sus tipicas jodas que le gustaba hacerme de vez en cuando.

"¿nee-san?, ya no es gracioso, para de una vez."

me di finalmente la vuelta cuando senti un chaspoteo de ¿agua?, no, logre enfocar el suelo con la luz de la luna que alumbrada cada lugar de la casa, menos el rincon.

deje caer el vaso, inicie a retroceder, mis ojos se abrieron de par en par, apenas y podia pronunciar las siguientes palabras.

"¿nee-s-san?"

el suelo estaba inundado de sangre, un olor putrefacto inicio a invadir toda la cocina, mejor dicho, toda la casa, ¿era real lo que veia?, espero esto sea una maldita pesadilla, ¡quiero despertar!

mi unica vision era del menor, theo, su cabeza estaba en las garras de aquel demonio, la boca de mi querido hermanito estaba cocida y sus ojos..¡no estaban!, observe finalmente al rededor de ese demonio y hay estaban sus restos..sus brazos, piernas, ojos, y torso..todos llenaban el suelo con sangre.

reaccione finalmente cuando aquel demonio dijo las siguientes palabras que hoy en dia me atormentan.

"-le hubieras creido-

corri hacia las habitaciones donde dormian mis padres y mi hermano, pero este ya no estaba, solo estaban mis padres..pero sus restos estaban en todos lados, tarde, llegue muy tarde.

no paso mucho tiempo desde que el olor a putrefaccion habia invadido mis fosas nasales por completo, mis ojos emanaban lagrimas de desesperacion y mi boca no paraba de gritar.

el demonio me habia acorralado pero antes de que este me atrapara salte por la ventana, varios vidrios habian atravesado mi piel y mi ropa, esto dejo un rastro de olor a sangre que pronto percibirian los demas.

logre ocultarme entre los arboles y camuflar el olor a sangre, no paso mucho tiempo despues que mi vista inicio a nublarse, mi cuerpo no respondia por el cansancio y mi respiracion iba cada vez mas lenta.

habian historias de unos "pilares" se dicen que ellos eran los cazadores de demonios mas fuerte que existian, que siempre lograban salvar a los humanos.

pero

"¿donde estaban cuando yo los necesite?"

esa famosa leyenda..¿pilares?, que absurdo.

no sabia donde estaba, me dolia todo el cuerpo, mis ojos no respondian, solamente escuchaba ruidos provenientes de cada rincon, ¿estaba muerto?, esa pregunta recorria cada segundo mi mente, finalmente logre salir de aquel coma que duro dias.

cuando abri los ojos solo observe, estaba en un lugar amplio, acostado en un futon, alado mio estaba una señorita de cabello blanco y ojos hipnotizadores, ella curaba mis heridas

.trate de abrir la boca para preguntar donde estaba pero no pude, el dolor era tan insoportable que me lo prohibia, "¿me habre fracturado la mandibula?"

escuche decir ala mujer unas palabras, no pude entenderla pero antes de volver a caer en el sueño, pude observar como una silueta alta de un hombre, ingresaba al cuarto.