¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
⚠️NO ES +18⚠️
SINOPSIS: Ken Sato borracho...? Me imagino que un borracho pegajoso y enfurruñado.
CRÉDITOS EN TUMBLR A: @chocar
Kenji Sato, legendaria estrella del béisbol, máximo héroe de Japón como Ultraman, y... actualmente llorando mientras se aferra a tu cintura.
—"¡¡Keeennnn!!"
Resoplaste, caminando con el peso extra hacia el dormitorio que ambos compartían.
—"¡¡¡Bebé!!!"
Él gimió en respuesta en el mismo tono, frotando su rostro contra tu calor como si quisiera fusionarse contigo.
Ha estado parloteando sobre su equipo, su trabajo, Emi, su padre, llorando por tu atención durante los últimos treinta minutos desde que llegó a casa apestando a cerveza.
Todo mientras intentabas llevarlo al baño.
Has intentado persuadirlo, hablarle dulcemente con palabras dulces y promesas de abrazos, de desayuno en la cama y todos los besos y atención que quiera, pero... sin éxito.
—"Deja de empujarme y alejarme..."
El hombre mismo gime, acurrucándose contra tu costado, con los ojos llorosos entrecerrados mientras su rostro se arruga y sus labios ridículamente regordetes se fruncen de una manera que tira de tu corazón.
—"¡Me odias!"
Sus cejas se fruncen y el peso cae completamente sobre ti mientras te derriba al suelo.
—"Kenji"
Te quedaste inexpresivo, rodando sobre tu espalda, con los brazos cruzados sobre tu cara.
Uno, dos, sus mocos húmedos.
Miras hacia abajo, derrotada, mientras él se arrastra a lo largo de tu cuerpo, gimiendo algo en voz baja, y entierra su cara en tu cuello.
Sus cálidas lágrimas mojan tu cuello y frotas su espalda, suspirando.
—"Necesitamos limpiarte, Ken"
—"Te extrañé, nena, hic , tanto, tanto, tanto, mucho ..."
Tus dedos arañaron su cuero cabelludo, recorriendo su cabello.
—"Es tan- hic -difícil- Te extrañé- Te extraño- hic -"
Sus gemidos apagados vibran contra tu cuello, sus labios besan descuidadamente tu mandíbula.
Lo dejaste quejarse un poco antes de tirar suavemente de su cabello.
—"Lo sé, cariño Ken, lo sé. Pero vamos a darte una ducha caliente y a ir a la cama, ¿eh?"
Estiraste el cuello para picotearle la línea del cabello.
—"Te daré todos los abrazos que quieras, ¿de acuerdo?"
Levanta la cabeza aturdido, con los ojos entrecerrados y rebosantes de lágrimas mientras traga con fuerza.
Hay una larga pausa mientras intenta deducir tu sinceridad, antes de fruncir los labios y alejarse de ti como un niño petulante.
—"....está bien"
Te sentaste y le ofreciste una sonrisa amable mientras le alborotabas el cabello.
