Love strucks [Nolan Hansen]

cap. 17

2017

- Me gustas- dijo el pelinegro, algo que tomo por sorpresa a Mirena.

- ¿Qué?- su mirada se posó en el chico rápidamente, que simplemente repitió lo antes dicho.

- Me gustas, Mire- ahora ambos cruzaban miradas, Rena sentía que su corazón estaba por salirse.

- Mi padre va a matarte ¿Lo sabes no?- Milo soltó una pequeña risa.

- ¿Y eso qué? Me gustas, y nadie en el mundo va cambiarlo- Él dirigió su cuerpo en dirección a la chica, la cuál imitó su acción, ambos quedaron frente a frente y conectaron sus miradas.

- ¿Y ahora? ¿Qué?- preguntó divertida.

- Bueno, tal vez pueda besarte, y tal vez después podamos revelar nuestra relación- sus miradas se intensificaban y sus labios se acercaban cada vez más.

- ¿Tendremos un casamiento?- ambos rieron.

- Seguro, sino ¿Para qué son las relaciones?- en ese momento ambos conectaron en un dulce y corto beso, que para los dos, era el inicio de la relación de sus vidas.

Al cabo de unos meses todos estaban contentos por la reciente pareja.

- Oh créeme, él es un excelente muchacho- dijo la señora Fiorito, la madre de Mirena.

- Sí, estoy totalmente segura de eso- Mirena y su madre dirigieron su vista al patio trasero, en dónde se encontraban el padre de Rena y su actual novio, el cuál sentía que sería el gran amor de su vida. Ese día conocería a sus suegros, bueno, ella no, pero sus padres sí. Mirena estaba muy nerviosa, sentía que está era su primera relación formal, y eso la aterraba, porque significaba que estaba creciendo. En un par de meses sería su graduación, eso también la abrumaba un poco.

- ¿Qué estudiarás querida?- preguntó su suegra mientras comían.

- Oh, leyes, es lo que más me gusta- le regaló una sonrisa.

- Tengo suerte de tener un año más para decidirme- dijo Milo con cierta inocencia.

- Claro que sí, si todavía eres todo un niño- habló Ren divertida, pudo ver la molestia de su pareja en su rostro, algo que le causó gracia.

- ¡Que suerte que seas la novia de mi hijo! Realmente no podría pensar en alguien mejor para él- el padre de Milo miró con mucho orgullo a la pareja.

- Oh, créanme que el sentimiento es mutuo- la madre de Ren ahora habló. Los chicos estaban felices, pues les agradaba que después de todo sus padres aceptaron su relación, eso los hizo sentirse más seguros para revelar su relación a los medios. Algo que claramente no pasó desapercibido.

- ¡Mira todo lo que dicen!- exclamó emocionado Milo.

- "Una pareja que sin duda ganó la lotería", eso es tan tierno- Rena río.

- ¡Dicen que esperan que nos casemos!- él se encontraba muy emocionado, algo que le pareció muy tierno a su novia.

- ¿Entonces? ¿Qué esperas para darme el anillo?- preguntó divertida, a lo que Milo salió corriendo, regresando con un anillo muy bonito.

- Mirena Fiorito, querida Rena, ¿Quisiera usted ser la reina de todas mis mañanas, la madre de mis hijos, la señorita Manheim, por el resto de su vida?- ella lo miró mientras estaba al borde de lanzar sus carcajadas, pero se levantó rápidamente de su cama y se paró enfrente.

- Dejame pensarlo... ¡Sí!- él se tiró encima de ella mientras llenaba de besos su cara.

- ¡Oh señorita, me hace el hombre más feliz de la tierra!- ambos quedaron tendidos en el piso mientras seguían abrazados.